Mística Cristiana es tema de encuentro en Tenerife, España

Tenerife (Miércoles, 26-11-2014, Gaudium Press) Con el tema «Mística Cristiana y Compromiso Social. En el 500 aniversario del nacimiento de Santa Teresa de Jesús», se ha desarrollado en la diócesis de Tenerife, España, una semana teológica sobre mística profundizando en la figura de la santa teresiana a propósito de su jubileo.

Organiza por el Instituto Superior de Teología (ISTIC) de la diócesis de Tenerife, la jornada ha contado con la presencia del Padre Antonio Mas Arrondo, licenciado en Teología por la Facultad de Teología de Lyon, en Teología Dogmática por la Universidad Gregoriana de Roma y Doctor en Teología por la Facultad de Teología del Norte de España.

Las «Moradas del Castillo Interior» es la última obra escrita de Santa Teresa de Jesús, considerada por muchos su mejor escrito / Foto: Gaudium Press.

La primera parte de la semana teológica ha girado en torno a la mística general con las ponencias «El origen de la mística teresiana» y «Presentación del ‘Castillo Interior’ de Santa Teresa», que ofreció el Padre Arrondo, para continuar luego profundizando sobre las Moradas de Teresa de Jesús. La jornada también ha contado con talleres sobre mística que fueron guiados por D. Francisco Javier Fuentes Martínez.

De acuerdo con Arrondo la intención de las ponencias ha sido explicar cómo el ‘Castillo Interior’ al que se refiere la santa mística, se puede aplicar a la realidad actual y cotidiana «como una forma de presentar un itinerario espiritual que tiene consecuencias sociales. Es presentar a la mística desde la realidad que nos toca vivir en estos momentos en la Iglesia y en la sociedad».

Las «Moradas del Castillo Interior», conocidas simplemente como «Las Moradas», es la última obra escrita de Santa Teresa de Jesús, considerada por muchos su mejor escrito y catalogada como una de las obras más representativas de la mística cristiana y de la prosa del Siglo de Oro Español.

Esta obra literaria es una alegoría de los grados de la vida espiritual, iniciando desde la ascética, hasta la mística, grados de vida espiritual vividos por la propia Santa Teresa.

Así explica Ella en su Obra este itinerario al hablar de las Moradas Primeras:

«Estando hoy suplicando a nuestro Señor hablase por mí, porque yo no atinaba a cosa que decir ni cómo comenzar a cumplir esta obediencia, se me ofreció lo que ahora diré, para comenzar con algún fundamento: que es considerar nuestra alma como un castillo todo de un diamante o muy claro cristal, adonde hay muchos aposentos, así como en el cielo hay muchas moradas. Que si bien lo consideramos, hermanas, no es otra cosa el alma del justo sino un paraíso adonde dice Él tiene sus deleites. Pues ¿qué tal os parece que será el aposento adonde un Rey tan poderoso, tan sabio, tan limpio, tan lleno de todos los bienes se deleita? No hallo yo cosa con que comparar la gran hermosura de un alma y la gran capacidad; y verdaderamente apenas deben llegar nuestros entendimientos, por agudos que fuesen, a comprenderla, así como no pueden llegar a considerar a Dios, pues El mismo dice que nos crió a su imagen y semejanza. Pues si esto es, como lo es, no hay para qué nos cansar en querer comprender la hermosura de este castillo; porque puesto que hay la diferencia de él a Dios que del Criador a la criatura, pues es criatura, basta decir Su Majestad que es hecha a su imagen para que apenas podamos entender la gran dignidad y hermosura del ánima».

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Con información de SIC.