Ciudad de México (Miércoles, 10-12-2014, Gaudium Press) El próximo viernes 12 de diciembre es la fiesta de Nuestra Señora de Guadalupe, Patrona de México, América y Filipinas. Con motivo de la celebración el Cardenal Norberto Rivera Carrera, Arzobispo Primado de México, ha dirigido un mensaje a los fieles de su país señalando que «Ella es la estrella de la evangelización, en esta nueva evangelización, que nos guía a ese amor pleno y total del Señor del Universo».
Recuerda que Nuestra Señora de Guadalupe es aquella mujer mestiza, quien llevó en su vientre a Aquel que es el Amor, y quien realizó en perfección la inculturación del Evangelio. «Por ello -subraya el purpurado-, es de gran importancia que en nuestros días se conozca el mensaje de unidad y de amor de nuestra Reina del Cielo, de nuestra Morenita, cuyo mensaje está centrado en Jesucristo. Ella es la estrella de la evangelización, en esta nueva evangelización, que nos guía a ese amor pleno y total del Señor del universo».
La Virgen de Guadalupe «es un gran ejemplo de evangelización perfectamente inculturada» / Foto: Oscar Hernández Benavente. |
Un mensaje al que han hecho referencia los Sumos Pontífices a lo largo de la, tal como cuenta el Cardenal en la misiva: «La importancia de su mensaje ha sido proclamada por los Papas desde hace siglos. Por ejemplo, cuando el Papa Benedicto XIV concedió, en 1754, Misa y Oficio propio para festejar a Santa María de Guadalupe los días 12 de diciembre, y manifestó la famosa frase: ‘Non fecit taliter omni nationi’, Dios no hizo nada igual con ninguna otra nación».
En este sentido el Cardenal Rivera hace un recuento de cómo el mensaje de la Virgen de Guadalupe en los últimos años ha llamado la atención de los Pontífices. Como ocurrió con Pablo VI quien el 12 de octubre de 1979 señaló que la devoción a la Guadalupana «sigue conservando entre vosotros su vitalidad y su valor, y debe ser una constante y particular exigencia de auténtica renovación cristiana». O como se refirió San Juan Pablo II quien la llamó «Reina de toda América»: «Y América, que históricamente ha sido y es crisol de pueblos, ha reconocido ‘en el rostro mestizo de la Virgen del Tepeyac, (…) en Santa María de Guadalupe, (…) un gran ejemplo de evangelización perfectamente inculturada’. Por eso, no sólo en el Centro y en el Sur, sino también en el Norte del Continente, la Virgen de Guadalupe es venerada como Reina de toda América», cita el Arzobispo de México.
Asimismo, hace memoria del Documento de Aparecida, recordando que «María, así como dio a luz al Salvador del Mundo, trajo el Evangelio a nuestra América», y de las palabras que dirigió el Papa Francisco hace un año con motivo de la festividad de la ‘Morenita del Tepeyac’, ocasión en la que el Santo Padre confirmó la actualidad el Mensaje de Nuestra Señora de Guadalupe: «La aparición de la imagen de la Virgen en la tilma de Juan Diego fue un signo profético de un abrazo, el abrazo de María a todos los habitantes de las vastas tierras americanas, a los que ya estaban allí y a los que llegarían después. Este abrazo de María señaló el camino que siempre ha caracterizado a América: ser una tierra donde pueden convivir pueblos diferentes, una tierra capaz de respetar la vida humana en todas sus fases, desde el seno materno hasta la vejez, capaz de acoger a los emigrantes, así como a los pobres y marginados de todas las épocas. Una tierra generosa».
Millones de peregrinos rendirán homenaje esta semana a la Virgen de Guadalupe / Foto: Antigua Basílica de Guadalupe. |
Precisamente, el próximo 12 de diciembre la solemnidad mariana se conmemorará de un modo muy especial en la Basílica de San Pedro en el Vaticano en el marco de una celebración Eucarística que presidirá el Papa Francisco y concelebrará el Cardenal Rivera.
La Basílica de Guadalupe, por su parte, ya está lista para recibir a los millones de peregrinos que por esta fecha llegan a venerar a la ‘Morenita del Tepeyac’.
Seguir el ejemplo, de una fe sencilla, de San Juan Diego
Como parte de los festejos guadalupanos que tienen lugar esta semana en México, este martes 9 ocurrió en la Antigua Capilla de Indios, en el Tepeyac, la solemne celebración en honor a San Juan Diego, Misa que estuvo presidida por Mons. Christophe Pierre, Nuncio Apostólico en México.
«El mensaje que Dios nos ha hecho llegar con la presencia de Santa María de Guadalupe, y por medio de san Juan Diego, debe también iluminar nuestras mentes y alentar nuestros corazones en estos tiempos difíciles que nos toca vivir, para que la incertidumbre o la indiferencia no nos gane y aplaste», dijo el representante del Papa en México.
Mons. Pierre también invitó a seguir el ejemplo de una fe sencilla de San Juan Diego: «su esperanza y confianza en Dios y en la Virgen, su caridad, su coherencia moral, su desprendimiento y pobreza evangélica».
Con información de SIAME.
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