Colombo (Miércoles, 14-01-2015, Gaudium Press) LA Eucaristía de canonización de San José Vaz, presidida en Sri Lanka por el Papa Francisco, atrajo más de medio millón de peregrinos. Algunos de ellos debieron realizar grandes sacrificios para poder estar en la histórica ceremonia. El testimonio de uno de ellos, el joven Romello Dias, fue descatado por la agencia ACI, ya que muestra no sólo su fe personal, sino el testimonio de su familia.
Romello Dias y su familia, en el lugar desde donde participaron en la Eucaristía papal. Foto: ACI. |
Romello Días padece una enfermedad que los médicos aún no han podido diagnosticar, pero que le generó una discapacidad severa. Por este motivo, el joven de 20 años fue llevado al lugar de la celebración en una camilla, donde permaneció muchas horas antes del comienzo de la Eucaristía. De hecho, con el fin de obtener un lugar cercano desde el cual participar más fácilmente, la familia llegó a las 11 de la noche del día anterior.
«Quiero una gran bendición para mi hijo, le hará bien», explicó su padre a ACI, cuando comentó la decisión de pasar la noche en la intemperie. La fe de la familia no se ha afectado por las penalidades de su hijo, quien comenzó a presentar problemas de salud desde cuando cursaba grado noveno.
Gracias a su esfuerzo, el lugar que obtuvo Dias se encontraba apenas a 15 hileras de distancia del altar mayor.
Con información de ACI.
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