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Roma (Martes, 20-01-2015, Gaudium Press) El 2015 es, sin duda, un año de grandes acontecimientos para la Iglesia en torno a modelos de santidad. Además de los festejos por el 5º centenario de nacimiento de Santa Teresa de Jesús, así como las conmemoraciones por el bicentenario de la natividad de San Juan Bosco; también se celebran este año los 500 del nacimiento de San Felipe Neri, copatrón de Roma y fundador de la Confederación del Oratorio.
«Es un deber ligado con el oficio institucional que revisto, pero, sobre todo, es expresión gloriosa del alma, llamar su atención en el Año Jubilar del V Centenario de nacimiento de Nuestro Padre San Felipe Neri, que se abrirá el 25 de mayo de 2015 y concluirá el 26 de mayo de 2016: ocasión propicia para redescubrir en profundidad la insigne figura del ‘Apóstol de Roma’, que San Juan Pablo II saludó, en el Congreso general del Año Santo en el 2000, como portador de una gran herencia para toda la Iglesia», llamó el Padre Mario Alberto Avilés, C.O., Procurador General de la Congregación del Oratorio de San Felipe Neri, en mensaje dirigido el pasado noviembre a los hermanos de la Confederación e instituciones de inspiración oratoriana.
De esta manera, como continuó el Padre Avilés, «el Centenario verá sobrias y dignas manifestaciones destinadas, sobre todo, para estimular a nuestros Oratorios y nuestra vida, a menudo abrumada por la espiral del activismo que caracteriza nuestro tiempo».
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| El Arzobispo de Sevilla, Mons. Asenjo, bendice el busto con el relicario de San Felipe Neri / Foto: SIC. |
El epicentro de las celebraciones tendrán lugar en Roma y en Florencia -ciudad natal del santo-, pero también habrán actos conmemorativos en los países donde la Confederación de los Oratorios tiene presencia. Entre ellos, en Octubre del presente año, ocurrirá en la Ciudad Eterna el Congreso Internacional de Estudio «Un santo moderno: San Felipe Neri (1515-1595) en el quinto centenario del nacimiento», y tendrá lugar la muestra «El desarrollo de una imagen y el nacimiento de una icnografía: San Felipe Neri a través de la colección de estampas del Archivo de la Congregación del Oratorio de Roma», entre las que se expondrá la célebre pintura de Guido Reni «San Felipe Neri y la Virgen con el Niño».
Además de estas iniciativas, habrá solemnes celebraciones litúrgicas en la capital italiana y en Florencia, así como conciertos, la tradicional visita a las siete iglesias romanas -costumbre animada por el santo-, jornadas de espiritualidad para sacerdotes y laicos en torno a la figura del santo y la peregrinación de las reliquias de Felipe Neri en los países donde la Congregación del Oratorio tiene presencia.
Precisamente el pasado lunes 19 de enero, el Arzobispo de Sevilla, Mons. Juan José Asenjo, bendijo el busto que contiene el relicario con las reliquias del santo italiano. El Acto tuvo lugar en la capilla del Arzobispado de Sevilla, y contó con la presencia del Procurador General de la Congregación del Oratorio.
Durante la bendición del busto de quien también es conocido como el «Santo de la Alegría», Mons. Asenjo destacó la alegría, la vida de oración y la caridad, siendo éstas las principales virtudes del santo italiano. «El mundo necesita evangelizadores alegres, a imagen de este santo», agregó el prelado, quien también expresó que espera que la visita del relicario inspire en muchos «la imitación de sus virtudes».
En la ocasión, el Padre Avilés dijo también que las reliquias «representan para la Confederación los lasos de fraternidad entre todas las congregaciones y la Iglesia particular en donde están establecidas», como las 12 existentes en España, país donde están presentes desde el año 1673.
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San Felipe Neri
San Felipe Neri nació en Florencia el 21 de julio de 1515. En su juventud va a Roma donde, siendo aún laico, comienza a dirigirse a las personas en los mercados y plazas, y visita hospitales, animando a otros para que lo acompañasen. En 1544 se hace amigo de San Ignacio de Loyola a quien quiso seguir como misionero en Asia, pero finalmente desiste, ya que deseaba seguir con su labor en la Ciudad Eterna, donde conformó un núcleo que posteriormente sería la Hermandad del Pequeño Oratorio.
Algunos años después, en 1548, funda, junto a su confesor, Persiano Rosa, la Confraternidad de la Santísima Trinidad, por medio de la cual se ocupa de los peregrinos y de los enfermos. El 23 de mayo de 1551, tras seguir el consejo de su confesor, Felipe recibe las órdenes sagradas.
En 1564 el Papa Pío IV pidie a San Felipe estar a cargo de la Iglesia de San Giovanni de los Florentinos, donde lo acompañaron tres de sus pupilos, también ordenados sacerdotes. Allí viven en comunidad bajo la dirección del santo italiano, quien redacta una regla sencilla. Tiempo después en 1575, adquieren su propia Iglesia en Santa María de Vallicella, y el Papa Gregorio XII aprueba la Congregación del Oratorio. El santo falleció en Roma el 26 de mayo de 1595.
Con información de SIC y oratoriosanfilippo.org.
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