Singapur (Martes, 20-01-2015, Gaudium Press) El testimonio cristiano en todos los aspectos de la vida es uno de los desafíos de la Nueva Evangelización, tal como lo ha recomendado reiteradamente la Iglesia. El llamado universal a la santidad incluye, por supuesto, a las personas que se dedican a hacer empresa y generar riqueza para su sostenimiento personal y el beneficio de la sociedad. ¿Cómo involucrar entonces la identidad católica con el mundo de los negocios para dar un testimonio coherente con la fe? Este fue el tema abordado por la Catholic Business Network (Red Católica de Negocios) en un encuentro de más de 30 empresarios en Singapur el pasado 07 de enero y que ofreció consejos útiles para hombres y mujeres de negocio de esta ciudad – estado.
El encuentro hace parte de la serie «Mi Camino», en el cual los empresarios miembros comparten su experiencia personal en la vivencia de la fe. Foto: Catholic Business Network. |
Christopher James y su esposa Esther son propietarios de una cadena de restaurantes, y como muchas personas vivían su fe de manera superficial, limitándose a las exigencias mínimas. Sin embargo, participaron en un retiro de conversión en el Centro Católico de Espiritualidad local y eso permitió dar un cambio notable. «Me costaba trabajo», reconoció James al informativo Catholic News Singapur, «creer en la existencia de Dios. (El retiro) fue un punto de giro, donde llegué a darme cuenta de que uno puede tener una relación personal con Dios».
El cambio en su vida se manifestó no sólo en su práctica personal de la fe, sino en sus decisiones al frente de sus restaurantes, las cuales compartió con los empresarios presentes en el encuentro. «Nuestra misión es el personal, cultivar a las personas», indicaron. La idea no es imponer las creencias a los empleados, sino dar un testimonio coherente con un alto estándar ético. Una de las maneras de poner un sello cristiano a la cultura empresarial es para ellos «hablar con franqueza, en lugar de dar rodeos sobre la verdad», así como estar dispuestos a tener menos ingresos por renunciar a prácticas comerciales como la de poner los precios artificialmente más bajos que la competencia para perjudicarla.
Otro de los consejos expuestos fue el de tener un genuino interés por el bienestar y desarrollo del personal, por ejemplo resistiendo hasta donde es posible los tiempos de crisis para no cerrar un negocio del cual subsisten los empleados. Así mismo, la señora James afirmó que no oculta su fe y que ha creado grupos de oración a través de plataformas como Whatsapp para los empleados que se interesen por compartir esta dimensión y aseguró que su testimonio de oración y ayuno ha llamado la atención entre personas de otras religiones, lo que se convierte en oportunidades de compartir su fe.
La Red Católica de Negocios es una organización fundada en 2008 por un grupo de profesionales y comerciantes católicos, pensada como una plataforma de desarrollo que cuenta con el apoyo de la Arquidiócesis de Singapur. La organización motiva a sus miembros «en el avance de la moralidad católica, los valores y la ética», así como apoyar las labores sociales de la Iglesia, «extendiendo el amor de Dios y sirviendo a la comunidad con corazones humildes», destaca su presentación oficial.
Con información de Catholic News Singapur.
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