Ciudad del Vaticano (Martes, 20-01-2015, Gaudium Press) El Santo Padre Francisco erigió el pasado 19 de enero la Iglesia Católica Eritrea como Iglesia Metropolitana Sui Iuris, separándola de la jurisdicción de la Archieparquía de Addis Abeba, Etiopía. La decisión, anunciada en el Boletín de la Sala de Prensa de la Santa Sede, establece esta Iglesia como una provincia eclesiástica independiente bajo la autoridad de un prelado Metropolita en plena comunión con la Sede Pontificia. El Papa ha nombrado primer Metropolita a Mons. Menghesteab Tesfamariam, hasta ahora Obispo eparquial de Asmara.
Mons. Menghesteab Tesfamariam, nuevo Metropolita de la Archieparquía de Asmara, Eritrea. Foto: Archieparquía de Asmara. |
La nueva Iglesia Metropolitana, de rito oriental de tradición alejandrina, tiene jurisdicción sobre todo el territorio de Eritrea, que es dividido en cuatro Eparquías. La de Asmara, que fue elevada a Arquieparquía en la presente decisión y que comprende la región central del país con más de 30 mil católicos en casi 24 mil kilómetros cuadrados, y las de Barentu, Keren y Segheneity.
El nuevo Metropolita, Mons. Tesfamariam, nació en Berakit, parte de la Eparquía de Asmara, e ingresó en la comunidad de los Misioneros Combonianos en 1971. El prelado sirvió en Uganda y se formó posteriormente en Estados Unidos, recibiendo de San Juan Pablo II la dignidad de Obispo de Asmara en 2001.
Las normas contempladas para las iglesias metropolitanas sui iuris establecen que sus Metropolitas pidan al Pontífice la imposición del Pallium como símbolo de su comunión y una vez recibido tiene autoridad para convocar un Consejo de Jerarcas y ordenar Obispos. El Consejo de Jerarcas tiene un carácter legislativo dentro de la Iglesia, pero sus normas deben ser sometidas a la aprobación de la Santa Sede. El Metropolita es nombrado siempre por el Santo Padre.
Con información de Sala de Prensa de la Santa Sede y Iuscanonicum.org
Deje su Comentario