Toda una familia de Argentina inicia misión en Angola

Redacción (Miércoles, 21-01-2015, Gaudium Press) Ariel Serra y Bibiana Echeverría se conocieron de jóvenes participando en las actividades misioneras que organizaba la diócesis argentina de Villa María. Con el tiempo fueron creciendo en su compromiso, y una vez unidos en matrimonio decidieron servir en la comunidad de Andacollo, situada en el la provincia de Neuquén, donde creció en ellos el anhelo se servir a la Iglesia como misioneros. La pareja, junto con sus tres hijos -Héctor, de 15 años y a quien adoptaron cuando tenía 12, Tobías y Tadeo, quien es el más pequeño- llegaron hace unos días a la localidad Lumege de Angola, África, donde servirán como familia misionera al menos por dos años.

«Ir a Angola es parte del sí que dijimos como matrimonio y es partes de la disponibilidad con la que intentamos vivir. Ya somos familia misionera, solo que ahora cambiamos de domicilio», expresó la pareja de esposos días antes de partir a Angola en entrevista realizada por AICA.

Familia Serra Echeverría / Foto: AICA.

En este país, la familia acompañará la misión que tiene la Arquidiócesis de Buenos Aires, especialmente la labor de Evangelización que viene realizando el sacerdote argentino Ignacio Copello, quien es el párroco de la localidad de Lumege. A razón de ello, antes de partir, los cinco misioneros participaron del a misa de envío que presidió el pasado 15 de enero el Arzobispo de Buenos Aires, Cardenal Mario Poli, en la Basílica de Santa Rosa de Lima.

El nuevo hogar de la familia, situado a 128 kilómetros de Luanda, capital de Angola, cuenta con 15 mil habitantes, pero la jurisdicción de la parroquia alcanza los 40 mil, lo que significa que será una ardua labor evangelizadora la que llevarán a cabo allí. Ellos ya cuentan con una casa donde vivir, pero al instalarse deberán ver qué trabajo podrán desempeñar. «Nos involucraremos en cada ámbito donde uno puede meterse como familia y como vecino», comentaron los esposos misioneros antes de partir.

«El estilo nuestro de misión es involucrarnos y trabajar desde adentro en cada uno de los lugares que podemos estar», comentó entonces Ariel, quien también dijo que «por nuestro desarrollo profesional, se nos van abriendo puertas (…) y nos permite llevar el anuncio a los humildes».

Pero la misión no la harán solos, además del Padre Copello, también los acompañará la misionera Alba Comán. «Nosotros firmamos un convenio por dos años, y dentro del mismo hay muchas cosas previstas. Más que en familia, siento que vamos a misionar como parte de un equipo, el de Iglesias Hermanas -que es una institución eclesial que promueve la cooperación misionera entre diócesis-, y que nosotros somos los enviados, pero hay mucha gente detrás trabajando para lograr esto, y es impresionante (…) Este equipo nos consigue los fondos para viajar y sostener la vida allá. Solo le pedimos a Dios sabiduría para poder discernir los caminos que se nos va presentando, y lo hacemos con serenidad», comentó Ariel.

Para la familia Serra Echeverría su lugar en la Iglesia es ser misioneros. Es aquí, como ellos mismos afirman, donde han encontrado la vocación a la que fueron llamados por Dios. «Siempre estuvimos en la búsqueda de saber cuál era nuestro lugar en la Iglesia, y lo encontramos como familia misionera», aseguraron los esposos.

Con información de AICA.