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Maiduguri (Martes, 27-01-2015, Gaudium Press) El reciente ataque de Boko Haram a la ciudad de Baga, en Nigeria, significa para el mundo un sonido de alerta de una situación de violencia que pierde el control y amenaza la presencia cristiana en el norte del país. Mons. Oliver Dashe Doeme, Obispo de Maiduguri relató el drama de los cristianos en la región y alertó sobre el avance de los terroristas sobre la ciudad de Maiduguri: «La amenaza a la que debemos enfrentarnos es signo de un futuro muy sombrío para la Iglesia», declaró, según divulgó la plataforma Aleteia.
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| Mons. Oliver Dashe Doeme, Obispo de Maiduguri. Foto: Catholic Online. |
A las denuncias de destrucción de templos y éxodo masivo de civiles se suman las presiones que los terroristas imponen a los creyentes con el fin de obtener la apostasía de su fe. Los cristianos son amenazados con armas, «diciéndoles que si no se convierten serán asesinados y realmente algunos de ellos han sido asesinados por haber rechazado convertirse», denunció el Obispo. La preocupación aumenta a medida que se acerca el tiempo electoral con el peligro de que el grupo extremista islámico consiga controlar el norte del país y el prelado pidió acciones de la comunidad internacional para frenar la amenaza.
Según el prelado, 70 mil de los 125 mil fieles de la Diócesis tuvieron que dejar sus hogares. lo que pone en riesgo la continuidad de la presencia cristiana en la región. «Muchos de nuestros miembros se han dispersado y otros han sido asesinados; en algunas regiones ya no queda ningún cristiano», describió. «Pero la Iglesia pertenece a Cristo. La Iglesia seguirá siendo fuerte; además muchos de nuestros fieles han regresado tras la toma de sus tierras por los soldados nigerianos».
«Lo más importante es rezar por nuestro pueblo; sé que la gente reza por nosotros y se lo agradezco mucho», destacó Mons. Dashe Doeme. «Veo que la gente reza el Ave María, nuestra Madre María defiende nuestra causa. Tenemos una gran devoción a la Santísima Virgen», concluyó.
Con información de Aleteia.
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