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Ciudad del Vaticano (Jueves, 05-02-2015, Gaudium Press) Al dirigirse a los obispos griegos en visita ‘Ad Limina’, el Papa Francisco insistió en que la Iglesia tiene que trasmitir la confianza con que un cristiano mira el futuro: «Frente a la crisis económica y financiera que sigue sacudiendo con una dureza especial su país no se cansen de exhortar a todos a la confianza en el futuro, luchando contra la llamada cultura del pesimismo. El espíritu de solidaridad que todos los cristianos están llamados a testificar en la realidad de la vida cotidiana, es un fermento de esperanza».
El Pontífice también llamó a la manifestación de la comunión fraterna entre los prelados, que debe traducirse a su vez, con relación a los fieles, en una «diaconía de la fraternidad». Esa diaconía «por un lado postula la custodia y el fortalecimiento de las tradiciones culturales y las raíces cristianas de la sociedad griega, por el otro requiere apertura a los valores culturales y espirituales de los que son portadores los numerosos inmigrantes», señaló el Papa.
El Papa recuerda la necesidad para la misión evangelizadora «de un generoso clero y motivado», y en esa línea invitó a los obispos a promover la pastoral vocacional, habida cuenta de la escasez de sacerdotes, al tiempo que trasmitió su elevado aprecio con los presbíteros ancianos que hacen gala de una vida entera de entrega al apostolado.
Asimismo el Pontífice se refirió al papel de los laicos, y trató de la necesidad de incrementar «la presencia de los movimientos y asociaciones eclesiales… que trabajen siempre en sintonía con las líneas pastorales de la Iglesia y estén bien insertados en las diócesis y parroquias». El Papa Francisco pidió realizar programas de formación al matrimonio y de formación de las nuevas generaciones, como un medio de fortalecer la familia.
«Queridos hermanos en el episcopado -concluye- deseo expresar mi reconocimiento por la labor de evangelización que, a pesar de muchas dificultades, llevan a cabo en Grecia. El reconocimiento jurídico de la Iglesia Católica por la autoridad competente es un evento de gran importancia, que les ayuda a mirar con mayor serenidad al futuro, comprometiéndose con el presente con un dinamismo confiado y con el entusiasmo de los que son testigos del Señor muerto y resucitado. Los animo a perseverar con alegría evangélica su misión», concluyó el Papa.
Con información de Radio Vaticano
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