Washington (Viernes, 06-02-2015, Gaudium Press) La fiesta de San José, esposo de la Santísima Virgen y padre adoptivo de Jesús, motiva alrededor del mundo una notable devoción y actos de preparación como los Siete Domingos a San José que iniciaron el pasado 01 de febrero (ver noticia anterior). Esta celebración es una oportunidad para recordar las verdades teológicas ligadas a este gran santo (el primero entre los santos depués de la Santísima Virgen) y los católicos de lengua inglesa pueden hacerlo a través de un libro clásico destacado recientemente por la agencia informativa Zenit: La vida y glorias de San José, de Edward Healy Thompson.
San José, mosaico en la Basílica de San Lorenzo fuori le mura en Roma, Italia. Foto: Fr. Lawrence OP. |
El autor, convertido a la Iglesia Católica en 1846 tras haber sido presbítero anglicano, recuerda en la publicación las características de la figura de San José, en un texto «para ser consumido, saboreado, meditado», según Dennis McGeehan, del Catholic Writers Guild (Gremio de Escritores Católicos) de Estados Unidos. El escrito cita los conceptos de maestrso de espiritualidad y doctrina como Santo Tomás de Aquino, San Juan Crisóstomo, San Buenaventura, entre otros, así como los trabajos de teólogos reconocidos.
El texto es por su profundidad teológica una lectura con gran densidad y McGeehan recomienda su meditación para contemplar a San José a la luz de Jesucristo y la Santísima Virgen, sin quienes es imposible comprender al Santo Patriarca. «Jesús encarna la naturaleza Divina y humana en Él mismo, y María y Jo?e son por siempre parte de esa unión», expone el redactor, quien recomienda la manera como el autor conjuga las predicaciones de los Padres de la Iglesia para compartir lo que los creyentes han descubierto a través de la meditación sobre el nacimiento y la infancia de Jesús.
El autor recrea lo que debió ser la juventud de San José y la Santísima Virgen, la visita a Santa Isabel (que los Padres de la Iglesia suponen fue hecha por los dos esposos), la huida a Egipto y numerosos rasgos sobre otros hechos como la Presentación y la pérdida temporal de Jesús en el Templo de Jerusalén. «Lo que encontré de mayor beneficio fue la ilustración del rol de José como esposo de María y padre de Jesús», comentó McGeehan. «Él es hecho real y tangible».
«No podría recomendar suficientemente este libro», concluyó el redacto sobre este clásico de 1888. «Abrace al hombre que le enseñó a Jesús la Torá por primera vez, el hombre que Jesús llamó Papá».
Con información de Zenit.
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