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Ciudad del Vaticano (Lunes, 16-02-2015, Gaudium Press) El Cardenal Pierre Nguyen Van Nhon, Arzobispo de Hanoi, Vietnam, celebró su reciente creación como Cardenal no como un mérito personal, sino como un reconocimiento del Papa Francisco a las Iglesias particulares que «han sufrido mucho en el pasado» y que a pesar de estar distantes geográficamente «son igualmente parte de la Iglesia de Cristo». El purpurado destacó la devoción y fe de los habitantes de su país, quienes tuvieron que enfrentar una fuerte persecución religiosa después de la llegada al poder del régimen comunista en la segunda mitad del siglo XX y que apenas ahora han comenzado a recuperar su libertad de culto, si bien aún se presentan situaciones de marginación y violencia en contra de los creyentes.
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| Cardenal Pierre Nguyen Van Nhon, Arzobispo de Hanoi, Vietnam. Foto: VietCatholic News |
«Vietnam es pobre, se puede decir que al país le falta todo», expresó el Cardenal Van Nhon a la agencia Asia News después del Consistorio del pasado 14 de febrero. «Una cosa es cierta, no falta la fe en Vietnam, y cuando usted tiene la fe usted tiene todo lo que necesita». A pesar de las limitaciones materiales y la oposición estatal, la Iglesia en Vietnam registra uno de los crecimientos más pronunciados del mundo y recupera cada día más libertades para ejercer su apostolado. «Estamos muy felices de ser partes de la Iglesia de Cristo e intentamos proclamar crecientemente el Evangelio».
La compleja situación de la libertad religiosa en el país, con el cual la Santa Sede busca fórmulas de acercamiento que conduzcan al ejercicio pleno de la libertad de culto y de su apostolado fue también tema de la conversación de la agencia con el Cardenal, tema en el cual hizo un llamado a la prudencia. «Uno debe estar en vietnam, estar en el terreno para verdaderamente entender lo que significa», a la vez que invitó a los católicos a «orar por nosotros para que podamos compartir la fe con un creciente número de personas».
La Iglesia en Vietnam sigue siendo marcadamente minoritaria (7% del total de la población) pero el crecimiento de la Iglesia es fuente de una notable esperanza sobre su futuro: Más de tres mil seminaristas se preparan en los ocho Seminarios del país y la Iglesia da énfasis a la Pastoral Familiar, la cual ha probado ser fuente de crecimiento y de profundización del testimonio cristiano.
Con información de Asia News.
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