Manila (Jueves, 19-02-2015, Gaudium Press) La imagen de Nuestra Señora del Rosario de Manaoag, Filipinas, fue recibida en su Santuario con honores reales en una extraordinaria celebración que contó con la presencia de los Cardenales Luis Antonio Tagle, Gaudencio Rosales y Orlando Quevedo, docenas de Obispos y miles de devotos con motivo de la elevación del Santuario a la condición de Basílica Menor. El decreto de dicho reconocimiento fue hecho por el Papa Francisco en el mes de octubre de 2014, pero la ceremonia se llevó a cabo el pasado 17 de febrero, llegada del documento original a la nueva Basílica, lo que une al templo de forma especial con la Santa Sede.
Celebración de la elevación del Santuario de Nuestra Señora del Rosario de Manaoag, Filipinas, a Basílica Menor. Foto: CBCP News. |
El Cardenal Tagle, Arzobispo de Manila, explicó al pueblo creyente que la Basílica es «un símbolo efectivo del deseo de Dios de vivir entre su gente» y explicó que el templo es un llamado constante a los hijos de Dios para que «vengan a casa, lloren, expresen su sentimiento, busquen el perdón, pidan ayuda, den gracias y alaben a Dios». La influencia especial que tiene una Basílica en la vida de fe se expresa particularmente en las indulgencias concedidas a los devotos, quienes cuentan con varias oportunidades al año para obtener la indulgencia plenaria, de forma especial en las celebraciones especialmente vinculadas al ministerio petrino.
El purpurado recordó que a los devotos que «con el honor llega la misión» y les invitó a un mayor testimonio de la fe con motivo del privilegio recibido al tener acceso a una Basílica. «Espero que podamos abrir los ojos. Vemos a Dios en la Basílica pero, ¿lo vemos en nuestros prójimos, los hambrientos, los sedientos, los desnudos, los sin hogar, los prisioneros?». El Card. Tagle invitó a los presentes a incluir las necesitados de todas estas personas en la oración que se realice en el Santuario, de forma que no sea simplemente un lugar para pedir favores personales, sino también para interceder por todos. «Las personas que asisten aquí son visitadas por Dios. Pero cuando usted es visitado por Dios, usted debe salir en misión a visitar a otros, llevándoles a Dios y la Palabra de Dios a ellos», exhortó.
Existen seis ocasiones anuales en las cuales los fieles pueden ganar la indulgencia plenaria en una Basílica, siempre cumpliendo además las condiciones normales de la indulgencia (confesión sacramental, comunión eucarística y oración por las intenciones del Santo Padre): 1. En el aniversario de la dedicación de la Basílica. 2. En la memoria litúrgica del título de la Basílica. 3. En la solemnidad de los Santos Apóstoles Pedro y Pablo. 4. En el aniversario de la concesión del título de Basílica. 5. Una vez al año en una fecha determinada por el Obispo local. 6. Una vez al año en una fecha determinada por cada uno de los fieles.
Con información de CBCP News y Rappler.
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