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Ciudad del Vaticano (Martes, 03-03-2015, Gaudium Press) El Presidente de la Pontificia Comisión para América Latina (CAL) y prefecto de la Congregación para los obispos, Cardenal Marc Ouellet, envió un mensaje agradeciendo la existencia de los más de nueve mil misioneros españoles que trabajan por la evangelización en América Latina, conjuntamente con sacerdotes, religiosos y religiosas.
El Mensaje fue enviado en este segundo Domingo de la Cuaresma, cuando se conmemora el Día Hispano-americano, que, en este año, tiene como tema: «Evangelizadores con la fuerza del Espíritu Santo».
La iniciativa de conmemorar este día ocurre desde el año 1959 implicando a todas las diócesis de España, que, así, recuerdan los vínculos de solidaridad, comunión y colaboración evangelizadoras entre la nación ibérica y el continente latino-americano.
El tema «Evangelizadores con la fuerza del Espíritu Santo» se refiere al día de Pentecostés. En aquel momento, gracias a la fuerza del Paráclito, los Apóstoles salieron de sí mismos y se transformaron en gigantescos evangelizadores.
El mensaje del Cardenal Marc Ouellet cita el Documento de Aparecida del año 2007 y la Exhortación apostólica Evangelii Gaudium del Papa Francisco, que habla de la alegría «como símbolo elocuente de los evangelizadores de todos los tiempos».
El Presidente de la Pontificia Comisión para América Latina, en su Mensaje, invita a todos a una evangelización alegre, generosa, calurosa, audaz y plena de amor, hasta el fin, siguiendo el ejemplo de los evangelizadores intrépidos, corajudos e incansables del anuncio de la Buena Nueva de Jesús en el mundo.
El Cardenal Ouellet recuerda que aquel que evangeliza no lo hace con base en una iniciativa personal o por motivos diferentes del anuncio del Evangelio. Por el contrario, lo hace por Cristo, que da la fuerza de caminar y alcanzar todas las periferias del mundo, que precisan de la luz del mensaje de Cristo.
El Cardenal reconoce que en la misión evangelizadora existen obstáculos y dificultades. Sin embargo, sabe también que el misionero cuenta siempre con la ayuda y asistencia del Espíritu Santo y del amor de Dios.
El fuego del Espíritu arde en el corazón del verdadero misionero y anima a su obra evangelizadora, recuerda el Presidente de la Pontificia Comisión para América Latina (CAL), y exhorta a que se intensifique la oración personal.
Jesús camina y trabaja con el misionero, del coraje para proclamar, con voz fuerte, el Evangelio, en todos los tiempos y lugares.
¡La misión es una pasión por Cristo, pero también una pasión por su pueblo! – concluyó el mensaje. (JSG)
De la Redacción de Gaudium Press, con información de la Radio Vaticana.
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