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Córdoba (Miércoles, 18-03-2015, Gaudium Press) De fiesta se vistió la Villa Cura Brochero en Córdoba, Argentina el pasado lunes 16 de marzo; el motivo era la memoria litúrgica del beato José Gabriel del Rosario Brochero, conocido como el Cura Brochero, que la Iglesia Católica celebró por segunda ocasión tras la proclamación de la beatificación del sacerdote cordobés, ocurrida el 14 de septiembre de 2013.
La conmemoración, que ocurrió también en el marco del 175º aniversario del nacimiento del beato, y ante cientos de fieles y peregrinos argentinos, estuvo enmarcada por una solemne Misa que presidió Mons. Santiago Olivera, Obispo de Cruz del Eje, y concelebró el clero diocesano local.
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| La celebración de la memoria litúrgica del sacerdote cordobés ocurrió en la Villa Cura Brochero / Foto: AICA. |
«Venimos aquí a encontrar un padre, un hermano, un amigo como es Brochero. Solo mirar el Santuario, sus restos, las visitas, la novena y durante todo el año gente que viene, que experimenta la certeza que un Santuario es un lugar de brazos abiertos, que recibe y que expresa y debe expresar cada vez más, la Encarnación de la Misericordia del Amor de un Dios que busca, un Dios que espera, un Dios que abraza!», dijo Mons. Olivera durante la Homilía, quien luego invitó a todos a seguir el testimonio de santidad del beato: «Descubriendo que su vida ha sido la encarnación del Evangelio. Descubriendo que viendo la vida de este ejemplar sacerdote, ciudadano fiel, nosotros también leyendo su vida, podremos tomar el camino que se nos pide para encarnar en nuestra propia vida el Evangelio».
«Para eso están los santos. No son para honrarlos y ponerlos lejos de nuestras vidas, sino para acercarlos y decir: Este es el faro que ilumina, el camino que debo transitar, la posibilidad cierta de poder encarnar el Evangelio», agregó el prelado.
Más adelante, al retomar la lectura del Evangelio del día en la que se recordaba a Jesús como el Pastor Bueno que sana y transforma a través de un encuentro personal, el Obispo de Cruz del Eje expresó: «Por eso Brochero anunció el Evangelio, por eso Brochero trabajó en este monumento, a su trabajo pastoral, que ha sido La Casa de Ejercicios. Porque encontrarse con Cristo era la clave para una vida mejor. Y todos me parece que somos conscientes que tenemos que volver más y mejor a Jesús. Todos sabemos que nuestra Patria necesita el encuentro con Cristo. Todos tenemos necesidad de volver a mirar a Jesús, y tener sus sentimientos y seguir sus pasos».
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| Imagen de la Beatificación del Cura Brochero el 14 de septiembre de 2013. / Foto: Gobierno de Córdoba. |
Finalmente, al concluir la Homilía, el prelado elevó una oración para que el beato Brochero interceda por Argentina y también por toda la Iglesia Católica, además para que su ejemplo ayude a todos a incorporarse en los sentimientos de Cristo: «Esta vida ejemplar, pobre, entregada, con celo misionero, de esta predicación evangélica no de palabra, sino de vida, que nos ayude de verdad a volver incorporar e incorporar una y otra vez los sentimientos de Cristo: a acercar, a buscar, a no dejar nadie afuera, a hablar del amor de Dios. De este Dios que entregó su vida, el Dios hecho carne, Jesús que entregó su vida para que nosotros tengamos Vida y alcancemos la salvación (…) Brochero gastó y desgastó su vida predicando el Evangelio, con sus gestos y con sus palabras. Vayamos a Jesús, contemplemos a Jesús, dejémonos transformar por Jesús».
Una vez culminó la celebración Eucarística los fieles y peregrinos hicieron parte de una procesión por las calles contiguas al Santuario del Cura Brochero.
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Con información de AICA.
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