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Cracovia (Lunes, 13-04-2015, Gaudium Press) El Santuario Nacional de la Divina Misericordia en Cracovia, Polonia, es probablemente el lugar del mundo donde se celebra con mayor intensidad el Domingo de la Misericordia Divina instituido por el también polaco Papa San Juan Pablo II. La Eucaristía principal de esta Solemnidad fue presidida en el Santuario por el Cardenal Stanislaw Dziwisz, Arzobispo de Cracovia pidió a los presentes orar para que todas las personas del mundo encuentren la Misericordia de Dios en el encuentro con Jesucristo.
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| Una multitud de flieles participó en la Eucaristía principal en el Santuario de la Divina Misericordia en Lagiewniki, Polonia. Foto: Santuario de la Divina Misericordia. |
El purpurado invitó a los católicos de Polonia a compartir el mensaje de Cristo misericordioso con el mundo a través del testimonio de su respuesta a Dios. Una oportunidad para hacerlo será la próxima Jornada Mundial de la Juventud de 2016, que además coincide con el Año Santo de la Misericordia promulgado por el Papa Francisco. «Aquí, en Cracovia, vamos a compartir lo que tenemos, lo más preciado, nuestra fe en Jesucristo», afirmó el Cardenal, según reportó el informativo Idziemy. «Vamos a compartir la misericordia de Dios, que en este lugar se manifiestó a St. Faustina y San Juan Pablo II se lo dio al mundo como un signo de esperanza para la humanidad».
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| El Card. Stanislaw Dziwisz presidió la celebración principal en el Santuario. Foto: Santuario de la Divina Misericordia. |
Para compartir este tesoro «no son suficientes las palabras», indicó el Cardenal, quien motivó a los fieles a actuar y manifestar en su vida su devoción «para tocar el corazón de los que dudan, para que busquen la verdad y conozcan a Cristo vivo».
El purpurado recordó que la misericordia se encuentra también en la guía que la Iglesia ofrece al mundo al exponer su Doctrina, incluso en materias que hoy en día son poco comprendidas por algunos sectores. «El propósito de la enseñanza de la Iglesia no es el de imponer cargas sobre los hombros de los fieles o de ordenar imposible cumplir con las obligaciones», explicó. «La iglesia quiere ayudar a sus hijas e hijos a vivir en el mundo moderno, para seguir el camino de la verdad, la justicia y la solidaridad».
Con información de Idziemy.
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