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Buenos Aires (Martes, 05-05-2015, Gaudium Press) El pasado 01 de mayo la dedicación de un templo parroquial en Buenos Aires se convirtió en expresión de la comunión de la Iglesia a través de las naciones. La nueva parroquia es la primera en ser dedicada a San Juan Diego Cuauhtlatoatzin, el indígena que presenció las apariciones de la Virgen de Guadalupe en México y el templo es el primero en su honor fuera de su país.
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| El Cardenal Mario Poli ty el Cardenal Norberto Rivera en la Eucaristía de la dedicación del templo en honor a San Juan Diego. Foto: AICA. |
Para destacar esta ocasión especial, el Cardenal primado de México y Arzobispo de Ciudad de México, Card. Norberto Rivera, viajó hasta Buenos Aires y participó en la solemne bendición y dedicación de templo, y presidió la primera Eucaristía celebrada en él. El Rector de la Basílica de Guadalupe en México también viajó para acompañarlo, al igual que algunos fieles mexicanos, según informó la agencia AICA.
«Vengo del Tepeyac», expresó el Card. Rivera en su homilía, «donde Dios se ha mostrado con cada uno de nosotros gracias a su Madre, Santa María de Guadalupe, que eligió a un humilde indígena, Juan Diego, para que sea su mensajero. En él depositó toda su confianza, todo su amor, toda su misericordia».
Sobre el templo, el purpurado afirmó que estas construcciones materiales «nos ayudan a concentrarnos en nuestras relaciones con Dios» y animó a los fieles a recordar que ellos son templo del Espíritu Santo y su identidad como Iglesia, pueblo de Dios.
Una fiesta de fe
La celebración por el acontecimiento comenzó el jueves 30, víspera de la inauguración, día en que se ofreció una serenata a la Santísima Virgen María, a la cual asisitieron cientos de fieles de parroquias vecinas, quienes trajeron en procesión las imágenes de los Santos Patronos de cada comunidad parroquial.
También se ofreció un homenaje a Nuestra Señora de Guadalupe como Emperatriz de América antes de la solemne Eucaristía en el cual se realizó un desfile de banderas. Además del Cardenal mexicano, el Card. Mario Poli, Arzobispo de Buenos Aires, el Nuncio Apostólico en Argentina, Mons. Emil Paul Tscherrig y los Obispos auxiliares concelebraron la Eucaristía junto a más de 30 sacerdotes.
La cantidad de fieles que participaron en la dedicación y la Santa Misa hicieron necesaria la instalación de una pantalla gigante para que quienes no pudieron ingresar al templo participaran en la celebración. En la Eucaristía también se hicieron varios representantes de las autoridades civiles de Buenos Aires y el Embajador de México en Argentina, Fernando Castro Trenti.
Con información de AICA.
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