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Colonia San José (Martes, 05-05-2015, Gaudium Press) Miles de peregrinos se dieron cita el pasado 1º de mayo en la Colonia San José, para rendir homenaje al santo patrono de la Iglesia, el día también en que se proclamó como santuario diocesano al templo de esta pequeña localidad argentina, que fue fundada por alemanes del Volga, y que ha dado a la iglesia 21 sacerdotes y 28 religiosas.
Desde las 11, los peregrinos que se trasladaron hasta la localidad participaron de la adoración eucarística, que se prolongó hasta las 15. Media hora más tarde, los miles de fieles que se acercaron al templo fueron invitados a trasladarse al ingreso de la localidad para ir en procesión, desde allí, con la imagen de san José en andas. También se sumaron en este momento otras decenas de peregrinos venidos en bicicleta desde la capital provincial.
El obispo de Santa Rosa, monseñor Raúl Martín, presidió la misa que fue concelebrada por numerosos sacerdotes de la diócesis. Antes de la homilía, el sacerdote salesiano Alfredo Zentner, oriundo del lugar, dio lectura al decreto del obispo por el cual designa santuario al histórico templo del lugar donde se congregaba la otrora numerosa comunidad de inmigrantes que dio a la Iglesia 21 sacerdotes y 28 religiosas.
Luego, el obispo explicó que esta designación no fue más que un reconocer los hechos: el lugar es meta de constantes peregrinaciones, individuales y grupales, de quienes saben que san José en este paraje es pródigo en obtener gracias y, en particular, es propulsor de vocaciones de especial entrega al Señor.
Al finalizar la misa, un seminarista dio lectura a una nota enviada por
el papa Francisco a la hermana María Ester Cortabarría, religiosa de
María Auxiliador, impulsora incansable de los trabajos que convirtieron
este lugar inhóspito en una casa de acogida, en la que manifiesta su
alegría por la proclamación del primer santuario dedicado a San José en
la Argentina.
También se leyó una carta del cardenal Mario Aurelio Poli, arzobispo
de Buenos Aires y anterior obispo diocesano de Santa Rosa, en la que
manifiesta su alegría por esta proclamación y hace sentir su cercanía al
pueblo pampeano que tanto quiso.
Antes de la bendición final de la misa, el obispo invitó a los niños
presentes a que se acercaran al altar con una oración por las
vocaciones.
Con información de Aica.
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