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Buenos Aires (Viernes, 08-05-2015, Gaudium Press) Una emotiva serenata que comenzó con recitación de «piropos» (cumplidos) a la Santísima Virgen y que se prolongó hasta la medianoche con el canto del cumpleaños a la Patrona de Argentina fue la antesala de la fiesta de Nuestra Señora de Luján, una de las manifestaciones de fe más importantes del país.
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| Basílica de Nuestra Señora de Luján. Foto: Maxtdf. |
La multitudinaria fiesta es celebrada cada 08 de mayo en el Santuario Basílica de Luján, en Buenos Aires, y atrae una gran cantidad de peregrinos. En este año se han dispuesto siete celebraciones eucarísticas durante el día para acoger a los devotos, siendo la Eucaristía central la que celebrará el Arzobispo de Mercedes-Luján, Mons. Agustín Radrizzani, a las 3:30 de la tarde.
El Rector de la Basílica, P. Daniel Blanchoud, confirmó a la agencia AICA algunos detalles de la fiesta, que incluye un desfile cívico-religioso en la puerta de la basílica y una solemne procesión por las calles de la ciudad que dará inicio a las dos de la tarde. Además de las Eucaristías, se organizó un concierto de órgano en honor de la Madre de Dios a cargo del maestro Enrique Rimoldi, el cual se realizará a las siete de la tarde.
Durante todas las Eucaristías, el Santuario Nacional obsequiará a los peregrinos estampas de la Santísima Virgen que contienen un pequeño fragmento de la tela del vestido que la imagen usó durante 2014. El cambio del manto se realizó en una ceremonia solemne el pasado domingo 03 de mayo.
Nuestra Señora de Luján es la Patrona de Argentina y su imagen fue elaborada en terracota y debía ser enviada a Brasil tras haber llegado al puerto de Buenos Aires en 1630. La carreta que debió trasladar la imagen no pudo moverse de manera inexplicable el tercer día del recorrido hasta que no se bajó la caja que la contenía, de forma que los presentes entendieron que la Santísima Virgen deseaba permanecer en el lugar. Cuando se intentó entronizarla en un oratorio, la imagen desapareció en varias ocasiones para ser encontrada en el lugar del milagro, lo que reforzó la devoción popular y obtuvo la aprobación del apropiado culto a la advocación.
Con información de AICA.
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