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Lima (Jueves, 28-05-2015, Gaudium Press) En la misa de exequias por el alma del Padre Vicente Pazos González, primer Vicario Regional de la Prelatura del Opus Dei en el Perú, fallecido ayer 26 de mayo en Lima, el Padre Emilio Arizmendi Echecopar, actual Vicario regional del Opus Dei en Perú destacó que don Vicente fue «un hijo fiel de San Josemaría» y recordó que en la víspera antes de morir, Don Vicente Pazos había cumplido, el 25 de mayo, 68 años de fidelidad en el Opus Dei.
El Vicario Regional del Opus Dei en el Perú, resaltó de Don Vicente Pazos «su disponibilidad para los encargos y nos deja como ejemplo su fidelidad diaria al querer de Dios en lo pequeño». El Padre Arizmendi señaló que «siguió el consejo de San Josemaría de morir exprimido como un limón y sin dar la lata».
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| El Padre Pazos junto a San Juan Pablo II |
En la Eucaristía, celebrada en la Iglesia Nuestra Señora de la Medalla Milagrosa, en Lima participaron Mons. Juan Antonio Ugarte, Arzobispo emérito de Cusco; Mons. José Antonio Eguren, SCV, Arzobispo de Piura; Mons. Ricardo García, Obispo Prelado de Yauyos, Mons. Mario Busquets, obispo Prelado emérito de Chuquibamba, el Padre Emilio Arizmendi, actual Vicario Regional de la Prelatura del Opus Dei en el Perú y varios sacerdotes de la Prelatura.
El Padre Arizmendi agradeció la presencia del Arzobispo de Piura, Monseñor José Antonio Eguren SCV, quien también tuvo oportunidad de conocer y tratar al Padre Vicente Pazos, quien colaboró en la Arquidiócesis de Piura como defensor del vínculo así como predicador de cursos de retiro para seminaristas y sacerdotes, por lo que el Padre Arizmendi mencionó que Don Vicente también nos da ejemplo en «cumplir con fidelidad los encargos diocesanos».
Carta del Prelado del Opus Dei
El Padre Emilio Arizmendi leyó una carta enviada ayer desde Roma por el Prelado del Opus Dei, Monseñor Javier Echevarría, quien menciona «Junto a la pena honda -y es lógico que sea así- agradezcamos a Dios esta caricia, que nos ha llegado en el mes de mayo del año mariano. Él sabe más, y ha querido que Nuestra madre la Virgen llevara de su mano a Vicente, sacerdote, a gozar del Cielo, ya que ha sabido luchar para estar a toda hora bien preparado» (..) «Ahora, nos empuja desde Arriba en el apostolado en Perú y en el trato de amistad y confidencia, como nos enseñó San Josemaría: recordadle también mis intenciones», concluye Monseñor Echevarría.
Reseña biográfica del Padre Vicente Pazos
El Padre Vicente Pazos González falleció en la madrugada del martes 26 de mayo de 2015, a la edad de 83 años. Siendo muy joven, y luego de pedir la admisión al Opus Dei, fue a Roma a vivir junto al fundador del Opus Dei, en el Colegio Romano de la Santa Cruz. Había estudiado Derecho en Zaragoza y se doctoró en Derecho Canónico en Roma. Recibió la ordenación sacerdotal en 1955 y luego, a solicitud de San Josemaría, viajó al Perú, para trabajar apostólicamente en el Opus Dei en tierras peruanas.
Labor como Vicario Regional del Opus Dei en el Perú
Fue Vicario Regional del Opus Dei en el Perú desde 1962 hasta 1987, y tuvo la alegría de recibir a San Josemaría, en julio de 1974, quien estuvo en el Perú entre el 9 de julio y el 31 de ese mismo mes. Lo acompañó en su catequesis en San Vicente de Cañete, Lima y Chosica, donde san Josemaría se reunió con miles de mujeres y hombres que frecuentaban los medios de formación del Opus Dei en ese momento.
Impulsó la expansión del Opus Dei en diversas ciudades: Piura, Chiclayo, Arequipa y Cañete, además de Lima.
Impulso a la Universidad de Piura
Fue uno de los principales promotores de la fundación de la Universidad de Piura y su Vice Gran Canciller desde 1969 hasta 1987. En esa condición, en febrero del año 1985, le entregó una custodia, regalo de toda la comunidad universitaria al Papa San Juan Pablo II, en su visita a Piura.
En Piura fue Capellán Mayor de la Universidad de Piura durante muchos años y dio clases del curso de teología en el máster de la Escuela de Dirección de la Universidad de Piura.
En sus últimos años de vida, atendió sacerdotalmente a miles de mujeres y hombres, algunos de ellos sacerdotes, además de atender numerosos medios de formación como convivencias y cursos de retiro. Destacó siempre por su fidelidad al servicio del Opus Dei y de la Iglesia. Su fidelidad al espíritu del Opus Dei, su filiación al Padre y su dedicación a todos en la Obra fueron notas saltantes de su carácter, naturalmente parco y sobrio.
Con información de la Oficina de comunicaciones del Opus Dei en el Perú
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