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Ciudad del Vaticano (Viernes, 12-06-2015, Gaudium Press) Anunciar la misericordia de Dios, a quienes transitan y laboran en los aeropuertos: ese es el eje del mensaje del Papa Francisco a los capellanes católicos de la aviación civil, quienes están reunidos en un seminario global promovido por el Pontificio Consejo para los Migrantes e Itinerantes.
Los aeropuertos, que son «ciudad en la ciudad», son también el lugar para «redescubrir el rostro compasivo de Dios», por medio de la acción de los capellanes militares. A ellos pide el Papa una especial atención a los migrantes, refugiados y a los que piden asilo.
«También está el preocupante número de pasajeros sin documentos -a menudo refugiados y solicitantes de asilo- que se encuentran detenidos en las instalaciones aeroportuarias por períodos cortos o largos, a veces sin adecuada asistencia espiritual y humana».
El Papa tampoco olvidó situaciones dramáticas como la de secuestro de aviones o accidentes, en los cuales el capellán es «llamado y buscado por cuantos necesitan consuelo y aliento».
A todas las personas que se relacionan con el aeropuerto, la capellanía de aviación debe «proponer las palabras de Jesús como alternativa a las promesas del mundo que no dan la verdadera felicidad. Hoy en día se ha vuelto más urgente redescubrir el rostro compasivo de Dios y por esto será precioso el tiempo de gracia que nos ofrecerá el Año Santo de la Misericordia».
Asimismo la capellanía del aeropuerto «está llamada a ser un lugar de unidad en la diversidad para todas las categorías de personas» y los capellanes, «inmersos en la vida de esta singular comunidad única» deben colaborar a crear «unidad en la diversidad».
Con información de Radio Vaticano
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