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Redacción (Sábado, 20-06-2015, Gaudium Press) El pasado 12 de junio, 100 Santuarios en 50 países se unieron en la cuarta edición del Global Rosary Relay for Priests, un Rosario mundial por los sacerdotes en la Solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús, declarado por la Iglesia también como Día Mundial de la Oración por la Santificación de los Sacerdotes. Desde el templo de Nuestra Señora de Magadan en Siberia, Rusia, hasta el Santuario de Nuestra Señora de Guadalupe en Guatemala, cada uno de los templos tenía asignado una parte del Santo Rosario y un horario para hacer una cadena continua de oración.
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| Mapa de los Santuarios que participaron de la iniciativa. Foto: World Priest. |
La jornada rompió los récords de participación anteriores, obtuvo desde 2014 una Bendición Apostólica del Papa Francisco a través del Secretario de Estado, Card. Pietro Parolin y registró como hecho mayor la vinculación de los miembros del Rosario de los Niños en todo el mundo. Los fieles se acercaron a los Santuarios participantes o se unieron espiritualmente desde sus hogares.
«Esta experiencia sorprendente está abierta a todas las personas de fe», explicó Global Rosary Relay en su presentación oficial. «Al contribuir a este único y alegre evento todos los que toman parte apoyan el desafiante trabajo de los sacerdotes que atienden las necesidades espirituales de los católicos de todo el mundo».
Uno de los Santuarios que se unió en esta edición es el de Nuestra Señora de Guadalupe en Guatemala, donde la iniciativa tuvo un impacto mucho mayor al que el Arzobispo Oscar Julio Vián contempló inicialmente al dar su aprobación a la iniciativa. La directiva del prelado a los seglares fue la de «hacer lo que fuera necesario para dar a este evento la
importancia que merece», y el entusiasmo de los fieles fue tal que se organizaron relevos del Santo Rosario desde el día 23 de mayo en anticipación a la jornada del 12 de junio.
Entrevistas en radio y televisión fueron realizadas para promover la actividad y al rezo del Santo Rosario se sumó el compromiso de orar por un sacerdote en particular durante todo el año, encender velas con los nombres de los presbíteros y campañas de apoyo en favor de los sacerdotes ancianos y enfermos que requieren una mayor asistencia por parte de la comunidad.
Con información de CNS y World Priest.
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