Papa Francisco declara Venerable a Metropolita de la Iglesia Greco Católica Ucraniana

Ciudad del Vaticano (Sábado, 18-07-2015, Gaudium Press) El Arzobispo Metropolita Mons. Andrey Sheptytsky fue declarado Venerable por parte del Papa Francisco, al ser reconocidas sus virtudes cristianas en grado heroico como parte de su proceso de beatificación. El prelado tuvo la misión de dirigir a la Iglesia en Ucrania de rito griego durante casi toda la primera mitad del siglo XX, incluyendo las dos guerras mundiales y la ocupación del país por siete regímenes distintos.

Venerable Andrey Sheptytsky.

Este paso es fundamental en el avance de la causa de beatificación, que aún requiere de la comprobación de un milagro obtenido por la intercesión del Venerable prelado. El proceso del Arzobispo requirió una vasta investigación, ya que el liderazgo del prelado lo involucró estrechamente en la vida de Ucrania y su análisis sólo pudo comenzar en realidad tras la caída del régimen soviético, cuando salieran a la luz los documentos necesarios sobre el ministerio del hoy Venerable.

«Era un archivo rico», afirmó el Obispo Greco Católico de París, Mons. Borys Gudziak a Catholic News Service. «El Metropolitano Sheptytsky estaba involucrado en todo, de forma que requirió mucho tiempo analizarlo todo». Las difíciles condiciones de su ministerio episcopal fueron sorteadas con «un claro sentido de su identidad y de su dignidad dada por Dios».

Nacido en 1865, Roman Aleksander Maria Sheptytsky, tomó el nombre religioso de Andrey al ingresar en la Orden Basiliana. Fue elegido Arzobispo Mayor de la Iglesia Greco Católica Ucraniana cuando tenía sólo 36 años, y asumió con plenitud un rol de liderazgo en tiempos de crisis y graves incertidumbres. Durante su servicio episcopal, Ucrania padeció la ocupación de los regímenes Austríaco, Ruso, Ucraniano, Polaco, Soviético, Nazi y nuevamente el régimen Soviético.

La relevancia del Venerable Mons. Sheptytsky permitió que la Iglesia no fuera reprimida abiertamente durante su vida por parte del comunismo y que las autoridades tuvieran que permitir incluso un funeral público en su honor. Cinco meses después de su muerte, los Obispos fueron arrestados o desterrados y la Iglesia Greco Católica Ucraniana fue declarada ilegal.

Con información de The Catholic Register.