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Santiago de Compostela (Martes, 28-07-2015, Gaudium Press) La Iglesia en España celebró su fiesta patronal el pasado 25 de julio, día de Santiago Apóstol, en la Catedral de Santiago de Compostela. La ceremonia contó con la presencia de Arzobispos y Obispos de varias regiones del país, así como el Secretario de la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y Sociedades de Vida Activa, Mons. José Rodríguez Carballo. En su homilía, el Arzobispo de Santiago de Compostela, Mons. Julián Barrio, destacó el aporte de la fe para todas las dimensiones de la vida: «Desde la fe hemos de iluminar nuestra realidad, evitando que enmudezca ante las contradicciones del mundo, y dando claridad y firmeza a nuestras actitudes éticas y morales».
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| La fiesta del Apóstol Santiago es la ocasión tradicional para encomendar las necesidades y el futuro de España. Foto: Archidiócesis de Santiago de Compostela |
La Solemnidad del Apóstol Santiago es una fecha de gran importancia para el país, y en la celebración hizo presencia un delegado de los reyes y otras autoridades civiles. Mons. Barrio aprovechó la ocasión para destacar que no existe un ánimo de confrontación desde la religión hacia la vida de la sociedad, sino un aporte que trae enormes beneficios a la comunidad. «Sólo quien se siente peregrino hacia Dios, puede ofrecer esperanza y paz a la sociedad, según el espíritu de las Bienaventuranzas», recordó el prelado.
Testimonio de la fe en todas las dimensiones
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| Mons. Julián Barrio, Arzobispo de Santiago de Compostela, predicó sobre la importancia del testimonio cristiano para la vida de la sociedad. Foto: Archidiócesis de Santiago de Compostela |
La memoria litúrgica recuerda el martirio del Apóstol, por lo cual el Arzobispo pidió mantener la claridad del testimonio cristiano y destacó como ejemplo el servicio caritativo de la Iglesia, animado por su riqueza espiritual. El prelado también recordó que el Evangelio se ofrece en las «vasijas de barro» de la limitación humana de los creyentes, como evidencia del poder de Dios. «Sólo puede predicarse con credibilidad desde la cruz, desde la pobreza y desde la libertad», expuso, «redescubriendo la necesidad de Dios en la vida del hombre, y la exigencia de la espiritualidad para superar una visión puramente material de nuestra existencia».
«El testimonio del Apóstol Santiago nos motiva a vivir los valores del Evangelio, convencidos de que el cristianismo favorece la vida espiritual de las personas y de los pueblos, iluminando la dimensión cultural, social, económica y política para volver a la verdad del hombre», afirmó Mons. Barrio.
El prelado aceptó la Ofrenda Nacional que caracteriza esta fiesta y encomendó a Dios a todos los pueblos de España y en especial a las familias, «para que con la colaboración necesaria se esfuercen en la noble tarea de formar las generacione más jóvenes, animándoles a construir una sociedad en la que vivan los principios morales y espirituales, garantía de una sociedad con futuro».
Entre los prelados presentes en la Solemnidad se encontraban Mons. Jesús Sanz, Arzobispo de Oviedo; Mons. Camilo Lorenzo Iglesias, Obispo de Astorga; Mons. Luís Quinteiro, Obispo de Tui-Vigo; Mons. Alfonso Carrasco , Obispo de Lugo; Mons. José Leonardo Lemos , Obispo de Ourense; Mons. Jesús Fernández, Obispo Auxiliar de Santiago; Mons. José Diéguez, Obispo Emérito de Tui-Vigo y numerosos sacerdotes.
Con información de Archidiócesis de Santiago de Compostela.
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