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La Paz (Jueves, 13-08-2009, Gaudium Press) Ante los atentados con sobres explosivos registrados el miércoles en La Paz, la Iglesia Católica Boliviana ha hecho conocer su condena vehemente, no solamente por los siete heridos, sino porque estos actos «hieren profundamente la dignidad de la persona humana y resquebrajan las bases democráticas de nuestra sociedad».
Ese día, se produjeron explosiones en dos diferentes lugares, tras la manipulación de sobres «Manila» que un día antes habían sido depositados en las oficinas del Correo de Bolivia. Uno de los sobres explosionó en un céntrico edificio de la sede de gobierno, en oficinas de una empresa constructora, y el otro en la sede de la Federación de Transportistas a los Yungas, en el barrio de Villa Fátima.
La Secretaría General de la Conferencia Episcopal Boliviana ha difundido un documento en el que, además, sostienen que «el terrorismo se debe condenar de la manera más absoluta. Manifiesta un desprecio total de la vida humana, y ninguna motivación puede justificarlo en cuanto el hombre es siempre fin, y nunca medio.» (Doctrina Social de la Iglesia Nº 514)
La Iglesia Católica en Bolivia hace llegar a las víctimas de estos atentados y a sus familiares su palabra de cercanía y solidaridad, y ruega al Señor de la Vida por su pronto y completo restablecimiento.
Asimismo, la Conferencia Episcopal hizo un llamado a las autoridades del Ministerio Público a extremar sus esfuerzos para esclarecer estos hechos, dar con los responsables, aplicar las sanciones correspondientes y evitar que este tipo de atentados criminales queden por mayor tiempo en la impunidad.
El documento concluye señalando que «la vigencia del sistema democrático es un patrimonio que todos los bolivianos estamos llamados a salvaguardar. Que Dios Padre nos ilumine para vivir en fraternidad y nos mantenga firmes en la defensa de los derechos fundamentales de toda persona».
Los atentados
El primero de los sobres fue detectado y reportado a un equipo policial especializado que, lamentablemente, en la inspección, explotó dejando heridos a un jefe policial y un subteniente.
El segundo sobre explosivo, dirigido al dirigente del partido de gobierno, Fidel Surco, se activó en manos de la esposa e hija del destinatario. Arminda Colque, esposa, sufrió la explosión mientras llevaba el sobre a su esposo. Las heridas que sufrió ella y las personas que estaban alrededor, son de consideración y de informe médico reservado.
La Policía y el Ministerio Público anuncian que están investigando estos hechos criminales.
Por Elizabeth Paravicini
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