San Salvador (Miércoles, 05-08-2015, Gaudium Press) Una gran campaña nacional de oración fue convocada por los Obispos de El Salvador el pasado 30 de julio ante el grave incremento de la violencia en el país. La decisión tomada en la Asamblea Ordinaria de los prelados busca obtener de Dios el don de la paz en momentos en que las autoridades no consiguen controlar a las numerosas pandillas, culpables de un elevado número de asesinatos.
Procesión del Divino Salvador del Mundo en su fiesta del 05 de agosto, realizada en el marco de la campaña de oración por la paz del país. Foto: Arzobispado de San Salvador. |
Los Obispos recordaron la importancia de la oración para alcanzar de Dios la recuperación del orden público del país. «En este momento de mucho sufrimiento, dolor y luto, les animamos a fortalecer su fe y mantener la esperanza, confiando en la misericordia divina», exhortaron los Obispos. «Supliquemos al Divino Salvador que proteja y salve nuestra nación. Invitamos a todos a unirnos en oración por la paz».
«A nuestros sacerdotes les pedimos promover la oración por la paz en todo el país», ordenaron los prelados. «Que en todos los templos parroquiales y capillas donde está el Santísimo Sacramento, a partir de esta fecha, todos los días jueves y sábados por la tarde, se haga una hora de adoración al Santísimo. Que además se hagan procesiones, Rosarios, ayunos y sacrificios, suplicando a Dios el don de la paz para nuestra Nación».
«Daremos cuenta ante el tribunal de Dios»
A esta intensa campaña de oración los Obispos unieron su mensaje de cercanía a las víctimas de la violencia y sus familias y un reconocimiento a la población civil que «a pesar de los problemas por los que atraviesa, no se doblega y sigue adelante en el cumplimiento de sus deberes, con el espíritu trabajador y abnegado que le caracteriza». A ellos motivaron a no dejarse vencer por el mal y mantener sus principios y valores.
A quienes están involucrados en los crímenes y la violencia, los Obispos exigieron «deponer esa actitud y volver a Dios. Les advertimos que de todas nuestras acciones daremos cuenta ante el tribunal de Dios, y que nadie escapará de la justicia divina». Los prelados hicieron un llamado a la unidad del país y al trabajo en conjunto para recuperar el orden y la paz del territorio.
Los Obispos de El Salvador concluyeron su declaración invocando la gracia de la paz al Divino Salvador del Mundo, por intercesión de la Santísima Virgen, Reina de la Paz, así como del Beato Mons. Romero.
Con información de Arzobispado de San Salvador.
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