Menú 
Ciudad del Vaticano (Jueves, 06-08-2015, Gaudium Press) La Iglesia celebró este 4 de agosto la memoria de San Juan María Vianney, patrono de todos los párrocos del mundo.
El Cura d’Ars fue un pastor según el corazón de Dios: a 150 años de su muerte, él sigue siendo una figura de gran actualidad para los sacerdotes.
Por ocasión de esta memoria, el Cardenal Prefecto de la Congregación para el Clero, Mons. Beniamino Stella, tejió algunos comentarios en entrevista para la Radio Vaticana.
A continuación algunos de esos comentarios:
«A mi ver el Cura d’Ars es una figura que ya entró en la vida de la Iglesia y sobre todo debería incidir con su propia historia, con su enseñanza, en la vida de los religiosos de hoy. ¿En qué sentido?»
«Fue un pastor extremamente próximo al rebaño, en el sentido que compartió su historia y también compartió su pobreza. Fue un gran ejemplo para este rebaño, sobre todo con su simplicidad de vida. Y simplicidad y pobreza son dos virtudes que tienen una gran actualidad, también para el mundo de hoy», dijo el cardenal Prefecto.
Habiendo sido San Juan María Vianney un párroco dedicado al confesionario, no sería posible a Mons. Beniamino Stella dejar de hablar de ese hecho que define la figura del Cura d’Ars:
«Yo diría que uno de los mensajes substanciales, importantes del Papa Francisco, es el mensaje sobre la misericordia. Exhortó a los padres a tornarse, a ser confesores con el corazón abierto a la acogida de los pecadores. Justamente el Cura d’Ars nos enseñó este arte de recibir a los pecadores con el corazón abierto. (…) Todo pecador tiene necesidad de ser purificado y de encontrar la misericordia del Señor».
Confesionario, confesión, arrepentimiento, perdón… términos que inducen a hablar de misericordia, del Año de la misericordia. Y el Cardenal Prefecto, recordando al Santo Cura d’Ars, habló de la misericordia y de sus frutos relacionándola con un año tan especial, particularmente a los sacerdotes en su ministerio:
«Los sacerdotes hoy trabajan tanto. Así, me gustaría que este Año de la Misericordia se diese un trabajo más a los sacerdotes, pero no un trabajo burocrático, no un trabajo administrativo, sino un trabajo realmente sacerdotal, un trabajo justamente en el sentido profundo de recibir los frutos de este encuentro con Dios en la vida litúrgica, en el Sacramento de la Reconciliación, y también una necesidad para profundizar la fe».
«Tengo confianza de que el Año jubilar dará trabajo a los sacerdotes, sin embargo un verdadero trabajo sacerdotal, que los canse más, en el sentido de un cansancio saludable. Cansancio, compromiso, sacrificio en el sentido de que Dios quiere y que el Papa desea».
Mons. Beniamino Stella habló de oportunos recuerdos a propósito de lo que Francisco tiene más en el corazón en relación a los sacerdotes:
«Yo recuerdo un encuentro con el Papa aquí en la Congregación, en el mes de mayo, cuando el Papa dijo: ‘Se habla tanto de la reforma de la Curia Romana – el Papa estaba visitando los dicasterios de la Curia Romana – pero la reforma de la Curia está ligada a una reforma de la Iglesia, a un renovado redescubrimiento del Evangelio. Y a esta renovación de la Iglesia, se llega solamente por medio del ministerio de los sacerdotes’ «.
«Así, volvemos a la cuestión de siempre: el peso de los sacerdotes en la vida eclesial. El Papa desea mucho la autenticidad de la vida. (…) vida de oración, disciplina personal, dedicación apostólica, amor por el rebaño, estar con el rebaño… pastores del rebaño, fieles, humildes, simples. ¡Las personas escuchan aquello que decimos, miran como actuamos, nuestras acciones, pero sobre todo consideran aquello que somos! «, destacó el Cardenal Prefecto al concluir su entrevista. (JSG)
De la Redacción de Gaudium Press, con informaciones de la Radio Vaticana
Deje su Comentario