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Accra (Jueves, 27-08-2015, Gaudium Press) A través de un comunicado firmado por Mons. Anthony Adanuty , Obispo de Keta-Katsi y Vicepresidente de la Conferencia de Obispos de Ghana, la Iglesia reafirmó su compromiso de defensa de la dignidad y santidad de la vida humana y del sacramento del matrimonio y la familia. La declaración se produjo al término de un Congreso provida organizado por la Iglesia en la ciudad de Accra los días 07 y 08 de agosto.
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| Prelados de la Conferencia de Obispos de Ghana. |
La declaración incluye cinco puntos esenciales que resumen la posición de la Iglesia en esta materia y seis resoluciones. La primera afirmación es la dignidad de todo ser humano, creado a imagen de Dios y el inicio de la vida en la concepción. «Por tanto toda nación, toda institución, todo hombre y mujer deben respetar, proteger y defender la dignidad de cada vida humana desde el momento de la concepción hasta la muerte natural».
La segunda afirmación es sobre el carácter permanente indisoluble del sacramento del matrimonio y la institución familiar diseñada por Dios, abierta al amor y la vida, cuya redefinición «no debería nunca ser promovida ni apoyada en nuestra sociedad». La declaración recuerda también el carácter central de la institución de la familia, las virtudes de la castidad y la fidelidad y el deber de los profesionales de todos los campos de «usar su experiencia y pericia para promover y proteger la santidad de la vida, la dignidad de la sexualidad humana, las bendiciones de la maternidad y la belleza de la familia».
Las resoluciones anunciadas en el texto incluyen «ayudar a contrarrestar el surgimiento de la cultura de la muerte en Ghana a través de la enseñanza y promoción del Evangelio de la Vida», así como la oposición a la promoción del aborto y la anticoncepción, la asistencia a los jóvenes para ayudarles a rechazar la «hipersexualización» y las campañas contrarias a la moral de la Iglesia. La declaración anuncia la resistencia a las presiones culturales y a las campañas de control de población y un trabajo conjunto en la sociedad para «promover y sostener la importancia de la fe y la familia en el desarrollo, la educación y el orden social».
Los Obispos reafirmaron su invitación «a todos los miembros de la sociedad» al «noble servicio de defender constante y valientemente la santidad de la vida humana, el matrimonio y la familia», así como su esperanza de que estas acciones permitan «sembrar las semillas de una auténtica Cultura de la Vida para hoy y las generaciones venideras».
Con información de Conferencia de Obispos de Ghana.
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