Alepo (Lunes, 07-09-2015, Gaudium Press) Mons. Antoine Audo, Obispo caldeo de Alepo y presidente de Cáritas Siria, expuso a la agencia Fides la situación actual de los cristianos en el país y, aunque agradeció los gestos cristianos de acogida a los refugiados sirios en Europa, destacó que la primera preocupación de la Iglesia local es poder mantener la presencia cristiana en la región y dar motivos y seguridad a las familias cristianas para que no tengan que abandonar sus comunidades.
A pesar de las graves condiciones en Siria, es vital mantener la presencia de las comunidades cristianas en el país. Foto: Cáritas Internationalis |
«Ante las guerras que trastornan Oriente Medio, nuestro deseo como cristianos y como Iglesia es permanecer en nuestro país, y hacemos todo lo posible para mantener viva la esperanza», indicó el prelado, tras agradecer la preocupación que el Santo Padre ha expresado sobre el bienestar de los refugiados y su acogida por parte de los creyentes europeos.
Mons. Audo también manifestó su comprensión sobre las difíciles condiciones que motivan a miles de familias a abandonar el país, entre las cuales destacó «la situación de degrado, el aumento de la pobreza, la dificultad para tratar las enfermedades después de cuatro años y más de guerra». Sin embargo, el Obispo caldeo recordó que en medio de los sufrimientos «no podemos decir honestamente a la gente: huid, escapad, que alguien os acogerá».
«Respetamos a las familias que tienen hijos y se van. Yo nunca voy a decir una palabra, ni un juicio que no sea benévolo de quién se va porque quiere proteger a sus hijos del sufrimiento», describió el prelado. «Pero para nosotros es un dolor ver a las familias que se marchan, y muchos de ellos son cristianos. Es una señal de que la guerra no terminará, o finalmente prevalecerán aquellos que quieren destruir el país».
Mons. Audo lamentó que grupos de jóvenes estén decidiendo marcharse del país por su cuenta ante la negativa de sus mayores. «Es un fenómeno grave, que nace de la desesperación», advirtió. «Pero eso es lo que está sucediendo. Esto significa que sólo los ancianos permanecerán aquí». EL Obispo pidió a Occidente tener en cuenta las causas militares y políticas que generan la crisis humanitaria y cesar cualquier tipo de apoyo externo a los actores armados causantes de la violencia.
Con información de Agencia Fides.
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