Menú 
Ciudad del Vaticano (Jueves, 10-09-2015, Gaudium Press) 400 participantes de los Equipos de Nuestra Señora que se encuentran en Roma para la realización de su Encuentro Mundial fueron recibidos por el Papa Francisco en la mañana de este jueves, 10-09.
El Papa los alentó a colocar en práctica la espiritualidad del movimiento, fortificar el empeño misionero y ser instrumentos de la misericordia de Cristo en relación a las personas que vieron el matrimonio fracasado.
Al inicio de su pronunciamiento, Francisco recordó que el Encuentro precede al Sínodo de los Obispos que va reflexionar sobre los desafíos de las familias.
En este sentido, el Papa recordó el «papel misionero de los Equipos de Nuestra Señora, donde la vida conyugal se profundiza y se perfecciona gracias a la espiritualidad del movimiento», exhortándolos «a testimoniar, anunciar y comunicar para fuera, aquello que viven como parejas y familias».
«Las parejas y las familias cristianas – observó el Papa – normalmente están en mejores condiciones para anunciar a Jesucristo a otras familias, apoyándolas, fortificándolas y alentándolas».
En segundo lugar, el Pontífice invitó a las parejas, fortificados por el encuentro en equipo, a un empeño misionero.
El Papa llama la atención de la misión a ellos confiada, «que es tanto más importante como imagen de la familia – como Dios quiere, formada por un hombre y una mujer en vista del bien de los cónyuges y también de la generación y educación de los hijos – y que es deformada mediante poderosos proyectos contrarios apoyados, por colonizaciones ideológicas».
Al finalizar sus palabras, el Papa Francisco alentó a las parejas de los Equipos de Nuestra Señora «a ser instrumentos de la misericordia de Cristo y de la Iglesia en relación a las personas cuyo matrimonio fracasó»:
«No olviden nunca que vuestra fidelidad conyugal es un don de Dios, y que para cada uno de ustedes hubo misericordia. Una pareja unida y feliz puede comprender mejor que cualquier otra la herida y el sufrimiento que provocan un abandono, una traición, un fracaso del amor. Es necesario, por tanto, que puedan llevar vuestro testimonio y vuestra experiencia a ayudar a las comunidades cristianas a discernir las situaciones concretas de estas personas. (…) A ellos ustedes pueden dar mucho».
El Pontífice concluyó renovando su confianza y aliento en los Equipos de Nuestra Señora y recordando al fundador del Movimiento:
Desde que la causa de beatificación del fundador, Padre Enrico Caffarel fue iniciada, «rezo para que el espíritu santo ilumine la Iglesia en el juicio que a su tiempo deberá pronunciar a su respecto», dijo. (JSG)
(De la Redacción de Gaudium Press, con informaciones de la RV)
Deje su Comentario