Jijiga (Lunes, 21-09-2015, Gaudium Press) El P. Teklebirhan Yemataye, quien sirve en Jijiga, Somalia, advirtió a The Catholic Register sobre la grave situación de sequía en la región, la cual ha sido calificada como la pero en sesenta años por las Naciones Unidas. «Este año tenemos un gran temor por la escasez de lluvias», admitió el sacerdote. «No sabemos lo que va a pasar».
La sequía actual desafía incluso los proyectos desarrollados por al Iglesia. Foto: Caritas/David Snyder. |
La situación alerta a los organismos católicos de caridad, ya que incluso los pozos excavados por misioneros italianos hace 70 años están secos por primera vez, según reportó un reportero del informativo canadiense quien visitó el lugar en el mes de agosto. «Llamamos a esta una sequía en la que un camello carga a otro camello», indicó el director de la Oficina Católica de Desarrollo, Muluken Asnake.
La frase del director indica en la cultura local que las personas están forzadas a vender su ganado para obtener bienes y por no poder mantenerlo durante la sequía. Una persona con dos camellos vendería uno y cargaría en el restante los bienes adquiridos por su venta. Los poblados tienen la necesidad urgente de cavar nuevos pozos mas profundos para hallar agua y necesitan motobombas para extraerla por la dificultad de cargarla desde la profundidad únicamente con cuerdas y botes en un proceso que llaman «ordeñar agua».
Los organismos alertan sobre una alta mortalidad del ganado y el grado de sequí que supera el causante de las graves hambrunas de 1973 y 1984. Mukulen describió la gravedad de la urgencia: «Tenemos tres prioridades. La primera es agua. La segunda es agua y la tercera es agua» Varios proyectos financiados por la Iglesia para aliviar la escasez resultan insuficientes ante la inusual gravedad de la sequía, ya que requieren una cierta cantidad de lluvia para optimizar su uso y llevarla a las comunidades necesitadas.
Con información de The Catholic Register.
Deje su Comentario