Ciudad de Ho Chi Minh (Sábado, 26-09-2015, Gaudium Press) La Conferencia de Obispos Católicos de Vietnam se propuso enfocar su esfuerzo para el próximo Año Santo que comienza el 08 de diciembre como una oportunidad para «la evangelización de la vida social», un considerable reto en un país con graves limitaciones a la libertad religiosa. Los Obispos llevarán a cabo estudios sobre el crecimiento de la Iglesia en cada una de las diócesis y se proponen dar una nueva vitalidad a la actividad misionera.
El crecimiento numérico de la Iglesia en Vietnam ha permitido mejorar las condiciones del apostolado y los Obispos se proponen llegar a un mayor porcentaje de la sociedad. Foto: VietCatholic |
«La sociedad moderna de hoy quiere excluir a la religión de la vida social», afirmó el Arzobispo de Hue, Mons. Alphonse Nguyen Huu Long, según registró AsiaNews. «Sin embargo, muchos jóvenes desean retornar a ella con una espiritualidad renovada. Los jóvenes necesitan una nueva evangelización para fortalecer su fe y enfrentar los retos del materialismo y el consumismo». Esta exhortación hace parte de la preparación del Congreso anual sobre actividad misionera de la comisión Episcopal sobre Evangelización.
Si bien la Iglesia en Vietnam ha crecido numéricamente de dos millones d católicos en 1960 a casi siete millones en la actualidad a pesar de fuertes presiones contra la libertad religiosa, el porcentaje de católicos frente a la población total se ha mantenido estable con un cambio del 6.6% al 6.9%, lo cual constituye una seria preocupación para los prelados. Según la Conferencia de Obispos, unos 88 mil fieles toman parte en actividades misioneras, pero sólo se registran 41 mil bautismos al año.
En el pasado, los mayores desafíos para el crecimiento de la Iglesia eran representados por la persecución religiosa y la escasez de sacerdotes y templos en el norte del país. Muchas comunidades debilitaron su práctica religiosa por la imposibilidad material de sostener el apostolado a causa de estos motivos. La Iglesia en la actualidad posee una mejor infraestructura a lo largo del país, pero debe enfrentar los desafíos culturales de un mundo secularizado.
Con información de AsiaNews.
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