"La familia tiene carta de ciudadanía divina": Papa Francisco durante la Fiesta de las Familias en Filadelfia

Filadelfia (Lunes, 28-09-2015, Gaudium Press) «Lo más lindo que hizo Dios -dice la Biblia- fue la familia. Creó al hombre y a la mujer; y les entregó todo; les entregó el mundo: ‘Crezcan, multiplíquense, cultiven la tierra, háganla producir, háganla crecer’. Todo el amor que hizo en esa Creación maravillosa se lo entregó a una familia», así se refirió el Papa Francisco al presidir la Fiesta de las Familias, uno de los eventos conclusivos del Encuentro Mundial de las Familias celebrado desde el pasado lunes 21 en Filadelfia, Estados Unidos.

Ante miles de fieles, quienes desde tempranas horas se dieron cita el Boulevard Franklin Parkway de la ciudad estadounidense, el Sumo Pontífice también expresó que «la familia tiene carta de ciudadanía divina»; una carta que, como explicó, «se la dio Dios, para que en su seno creciera cada vez más la verdad, el amor y la belleza».

Papa Francisco ante miles de fieles en el Boulevard Franklin Parkway de Filadelfia / Foto: Paul Haring – CNS.

«Por eso -continuó el Papa- la familia es una fábrica de esperanza, de esperanza de vida y resurrección, pues Dios fue el que abrió ese camino».

Asimismo, dijo que «en la familia hay dificultades, pero esas dificultades se superan con amor. El odio no supera ninguna dificultad. La división del os corazones no supera ninguna dificultad. Solamente el amor es capaza de superar la dificultad. El amor es fiesta, el amor es gozo, el amor es seguir adelante».

Al concluir, el Santo Padre habló de los niños y de los abuelos, como ya lo ha hecho en otras oportunidades: «Cuidar a los abuelos y cuidar a los niños es la muestra de amor -no sé si más grande, pero yo diría- más promisoria de la familia, porque promete el futuro. Un pueblo que no saber cuidar a los niños y un pueblo que no sabe cuidar a los abuelos, es un pueblo sin futuro, porque no tiene la fuerza y no tiene la memoria que lo lleve adelante».

Ya durante la Misa de Clausura del Encuentro Mundial de las Familias, celebrada también en el Boulevard Franklin Parkway en la tarde del domingo 27, el Papa Francisco habló del amor en la vida de la familia y de la santidad, que está ligada a pequeños gestos: «Son gestos mínimos que uno aprende en el hogar; gestos de familia que se pierden en el anonimato de la cotidianidad pero que hacen diferente cada jornada. Son gestos de madre, de abuela, de padre, de abuelo, de hijo. Son gestos de ternura, de cariño, de compasión. Son gestos del plato caliente de quien espera a cenar, del desayuno temprano del que sabe acompañar a madrugar. Son gestos de hogar. Es la bendición antes de dormir y el abrazo al regresar de una larga jornada de trabajo. El amor se manifiesta en pequeñas cosas, en la atención mínima a lo cotidiano que hace que la vida tenga siempre sabor a hogar».

Desde tempranas horas fieles procedentes de varias partes del mundo se dieron cita en el el Boulevard Franklin Parkway para ver y orar junto al Papa / Foto: Alex Wong – CNS.

En este sentido dijo también que la fe justamente crece con la práctica y es plasmada por el amor. Por eso «nuestras familias, nuestros hogares son verdaderas Iglesias domésticas. Es el lugar propio donde la fe se hace vida y la vida se hace fe», agregó el Pontífice.

Luego prosiguió: «Jesús nos invita a no impedir esos pequeños gestos milagrosos, por el contrario, quiere que los provoquemos, que los hagamos crecer, que acompañemos la vida como se nos presenta, ayudando a despertar todos los pequeños gestos de amor, signos de su presencia viva y actuante en nuestro mundo».

Al concluir la homilía, el Papa alentó: «Todo el que quiera traer a este mundo una familia, que enseñe a los niños a alegrarse por cada acción que tenga como propósito vencer al mal -una familia que muestra que el Espíritu está vivo y actuante- encontrará nuestra gratitud y nuestra estima».

Tras concluir la celebración Eucarística el Santo Padre se dirigió al aeropuerto internacional de filadelfia donde saludó al Comité organizador, voluntarios y benefactores del Encuentro Mundial de las Familias y se despidió del pueblo estadounidense.

Con información de Radio Vaticano.