Valencia (Viernes, 30-10-2015, Gaudium Press) «Cáliz de la Misericordia», así es el lema del Año Jubilar Eucarístico del Santo Cáliz de la Última Cena que comenzó en Valencia este jueves 29 de octubre. La apertura del tiempo jubilar -concedido por la Santa Sede- ocurrió en la Catedral de la ciudad española, donde es custodiado el Santo Grial, en el marco de una solemne Eucaristía que presidió el Cardenal Antonio Cañizares, Arzobispo de Valencia. En la ocasión, el purpurado impartió la bendición con la indulgencia plenaria.
«Hoy es un día grande para nuestra diócesis, un día de acción de gracias porque celebramos la fiesta del Santo Cáliz», expresó el Cardenal durante la Homilía. Luego señaló que «Dios nos concede, por medio de la Iglesia, iniciar un Año Santo Eucarístico, el Año del Cáliz de la Misericordia que repetiremos cada cinco años para avivar en toda la comunidad diocesana el sentido del misterio de nuestra fe, la santa Eucaristía».
El Cardenal Cañizares, junto con el clero de la diócesis, da apertura al Año Jubilar Eucarístico del Santo Cáliz / Foto: AVAN – Víctor Gutiérrez. |
En otro momento, se refirió al gozo que trae el Jubileo, pero también la responsabilidad que significa «estar tan estrechamente vinculados a este misterio». Por lo que llamó a tomar conciencia de él, «con el corazón lleno de admiración y gratitud, y con esos sentimientos para entrar en esta Año del Cáliz de la Misericordia».
Igualmente, invitó a los fieles para que no dejen pasar la gracia de Dios en este año exhortándoles a adentrarse en este misterio, adorando al Señor, para que «nuestra diócesis recupere plenamente el misterio eucarístico y que sea, de verdad, como Dios quiere, una diócesis eucarística».
El fin de este tiempo jubilar -agregó el Cardenal Cañizares- es el de «adorar este misterio y vivirlo, contemplarlo e interiorizarlo, para alabar al Señor presente en este Sacramento de nuestra fe y cumplir el mandamiento nuevo que se nos entrega: amaos como yo os he amado».
La Misa de Apertura del Jubileo Eucarístico del Santo Cáliz comenzó con el traslado de la reliquia en procesión dentro de la Catedral, partiendo de su capilla hasta el altar mayor. Al paso del Cáliz se realizaron invocaciones al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo.
Al concluir la Eucaristía, el purpurado alzó el Cáliz e impartió la bendición papal con indulgencia plenaria para todos los fieles presentes, y también para los que seguían la transmisión televisada de la celebración.
Cartel del tiempo jubilar / Foto: calizdelamisericordia.org |
En la ocasión, el Arzobispo de Valencia también bendijo varias réplicas del Santo Grial, que luego fueron entregadas a algunas parroquias de la ciudad en reconocimiento por haber restaurado sus templos, por su labor pastoral o por algún motivo especial.
La petición de celebrar un Año Jubilar del Santo Cáliz fue hecha por Mons. Carlos Osoro, Arzobispo de Madrid y anterior Arzobispo de Valencia, quien solicitó a la Santa Sede poder celebrar cada cinco años en la diócesis española un Jubileo de la Eucaristía.
La Santa Sede aceptó que Valencia pudiese tener este tiempo de gracia cada cinco años, de acuerdo con un documento aprobado en agosto de 2014 y que está firmado por la Penitenciaría Apostólica en el que concedió «el Jubilar Año Eucarístico con añadida indulgencia plenaria» para la diócesis. Un tiempo especial que fue muy bien acogido por el Cardenal Cañizares, una vez asumió como Arzobispo de Valencia.
El 26 de octubre de 2016, cuando culmine este Año Jubilar para la diócesis de Valencia, el purpurado impartirá nuevamente la bendición con indulgencia plenaria. Durante este tiempo la Catedral será templo jubilar, con la posibilidad de ganar allí la indulgencia plenaria bajo las condiciones acostumbradas, es decir, la confesión sacramental, la comunión eucarística y oración por las intenciones del Papa.
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Con información de AVAN.
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