Menú 
San Carlos de Bariloche (Viernes, 30-11-2015, Gaudium Press) Con el lema «María, te pedimos la paz y alegría para nuestras familias», ocurrirá este fin de semana, 31 de octubre y 1º de noviembre, la 22º peregrinación de la Diócesis de San Carlos Bariloche, en Argentina, a la gruta de la Virgen de las Nieves.
La romería iniciará el sábado 31 con el encuentro para los abuelos y ancianos enfermos, que tendrá lugar a las 15:30 horas en la gruta y transcurrirá con el rezo del Santo Rosario y la celebración Eucarística. Este mismo día, en la noche, habrá una vigilia juvenil que se celebrará a partir de las 19:00 horas.
 |
| Esta devoción mariana se originó en el año 1580 cuando Juan de Garay, en el contexto de la fundación de Buenos Aires, puso el puerto bajo el amprado de la Virgen en esta advocación / Foto: Diócesis de Bariloche. |
El evento principal será el domingo 1º con la Misa central que presidirá el Obispo de la Diócesis de Bariloche, Mons. Juan José Chaparro CMF, a las 12:30 horas, en la que participarán los miles de peregrinos que llegarán hasta la gruta rezando el Rosario.
El Obispo diocesano, por medio de un video-mensaje, ha dirigido una invitación a sus fieles: «Se acerca una nueva peregrinación a la Virgen de las Nieves, Patrona de nuestra Iglesia de San Carlos de Bariloche, y queremos de corazón invitarlos a acompañarnos en esta fiesta de nuestra fe junto a la Virgen Santísima, la Madre de Jesús Nuestro Señor. Queremos que sea una fiesta de todos».
«El próximo domingo todas las parroquias, comunidades van a marchar. Damos la bienvenida y esperamos también que nos acompañen (…) Deseamos para todos una buena jornada», añadió.
Finalmente envió una bendición: «Que la Virgen Santísima nos acompañe en este caminar a todas las familias y grupos (…) Que el Señor nos bendiga a todos con su amor».
Nuestra Señora de las Nieves está situada muy cerca de la ciudad de Bariloche a pocos pasos del conocido cerro Catedral. La venerada imagen de la Virgen, patrona y protectora de los montañistas, se halla al interior de una gruta de piedra que fue construida en lo alto y a donde los fieles deben llegar tras subir unas empinadas escalinatas.
Esta devoción mariana se originó en el año 1580 cuando Juan de Garay, en el contexto de la fundación de Buenos Aires, puso el puerto bajo el amprado de la Virgen en esta advocación. Cada 5 de agosto se celebra una numerosa peregrinación hasta su gruta en la que participan peregrinos de toda Argentina.
«Madre de las Nieves, que como patrona proteges a tus hijos amantes de las actividades de montaña, y que desde la cima del Aconcagua hasta la extensión del llano, y que desde el norte de los Andes hasta el sur de nuestra patria se oiga esta plegaria: salve Santa Madre de Dios, protege a los montañeros y que las benéficas nieves enriquezcan nuestros campos», es el canto que suelen entonar los peregrinos que llegan al lugar.
La Madre de Dios lleva a su pequeño Hijo en los brazos, y su rostro refleja gran serenidad. Alrededor de la Gruta se puede apreciar centenas de recuerdos que los fieles han dejado como muestra de agradecimiento por sus innumerables favores.
Con información de AICA.
Deje su Comentario