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Turín (Jueves, 26-11-2015, Gaudium Press) El Arzobispo de Turín, Mons. Cesare Nosiglia, informó recientemente que la Iglesia, en colaboración con otras instituciones, adelanta una serie de iniciativas en favor de las personas sin hogar, los pobres y los inmigrantes que están presentes en la ciudad italiana.
Durante un encuentro que sostuvo con periodistas el pasado 14 de noviembre en la Facultad de Teología de Turín, el prelado comentó: «Deseo hacer un balance sobre una serie de iniciativas concretas que vigilia nuestra Iglesia, junto a las Instituciones, para promover una red de sinergias positivas a favor de las personas y familias en dificultad».
Entre las propuestas, recientemente la Arquidiócesis de Turín firmó un acuerdo con la ciudad por medio del cual se busca reavivar y regular una acción concreta para acoger a las familias en extrema necesidad de una casa. Este acuerdo se basará en la gestión de la Fundación Operti de Turín -institución sin ánimo de lucro de solidaridad social y basada en los principios de la Doctrina Social de la iglesia- de acuerdo con las oficinas diocesanas que se sitúan en las zonas interesadas.
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| Mons. Nosiglia, Arzobispo de Turín, comparte alimento con un sin techo / Foto: La Voce del Popolo. |
Asimismo, la diócesis, a través de sus diversos servicios sociales -entre ellos Cáritas, la Oficia de la Pastoral de los Migrantes y la Oficina de Pastoral- acompañará a las familias con necesidad en caminos de autonomía y en la promoción de una vida más digna.
Mons. Nosiglia también informó que recientemente se renovó la disponibilidad de las estructuras temporáneas para acoger durante las noches a los sin techo en la temporada invernal, y así atender la emergencia del frio. «Podemos ya garantizar unos cincuenta puestos», comentó, exhortando luego a las parroquias, así como a diversas realidades civiles, para que abran espacios de acogida nocturna «para tantos hermanos y hermanas sin techo». «La elección es siempre aquella de disponer pequeños grupos o individuos, para poder establecer una relación menos anónima y más personalizada», agregó el prelado.
Entre las iniciativas, el Arzobispo destacó aquella que invita a «un puesto en la mesa de nuestra casa», para acoger a personas o familias pobres en los hogares durante esta Navidad.
«Quiero volver a invitar, sobre todo a las familias, para que pongan en práctica un signo de misericordia y fraternidad durante las próximas festividades natalicias acogiendo una persona o un pequeño núcleo que vive en situación de pobreza, para compartir un almuerzo en la propia casa. El objetivo no es sólo responder a una necesidad inmediata de los pobres, más sí de comenzar una oportunidad de buenas relaciones, de conocimiento y de un encuentro fraterno», invitó Mons. Nosiglia.
Para ello, el prelado propone tres caminos posibles: el primero, desde la parroquia, sobre todo si ella está en grado de hacerse cargo de organizar sobre su territorio este intercambio fraterno con los más necesitados; el segundo, sería directamente con las familias que deciden acoger una persona en dificultad, pero que no conocen situaciones de pobreza en su sector. Ellos pueden informar a Caritas diocesana su disponibilidad de acoger a un pobre, y la organización caritativa se encargará de coordinar la iniciativa. El tercer camino es con las familias que ya conocen a algún hermano o hermana en situación de dificultad. «En este caso el camino es más simple, porque no hay necesidad de ninguna mediación. Basta la voluntad de dar el paso invitando directamente», comentó el prelado.
Mons. Nosiglia dijo que estas iniciativas son en últimas «una buena manera de hacerse don para los demás y para ser capaces de mejorar una concreta cercanía con los hermanos más frágiles. También es un don para nosotros mismos, porque el que más da, más recibe».
Con información de la Diócesis de Turín.
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