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Beijing (Martes, 15-12-2015, Gaudium Press) El inicio del Año Santo de la Misericordia en China se llevó a cabo en medio de contrastes a causa de las limitantes a la libertad religiosa en el país. Mientras que varias diócesis pudieron llevar a cabo la ceremonia de apertura de las Puertas Santas en condiciones normales, varias comunidades enfrentaron la intromisión gubernamental, la presencia de obispos ilegítimos e incluso el cautiverio de sus prelados como es el caso de la Diócesis de Shanghai, según reportó la agencia AsiaNews.
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| Apertura de la Puerta Santa en la Catedral de Todos los Santos en Nanchang, China. Foto: ChinaCatholic. |
Las ceremonias de apertura se realizaron particularmente el pasado domingo y durante la semana pasada, y fueron acompañadas de la impresión y divulgación de la bula papal Misericordiae Vultus mediante la cual el Papa Francisco estableció el Año Santo de la Misericordia y el Jubileo que permite a los fieles ganar la indulgencia plenaria a través de las peregrinaciones y el cumplimiento de las condiciones usuales. De igual modo el Jubileo de la Misericordia tuvo una gran difusión a través de redes sociales por parte de los cristianos y fue referida tangencialmente en la prensa nacional.
Las diócesis cuyo Obispo goza tanto de la aprobación de la Santa Sede como el reconocimiento de las autoridades oficiales pudieron celebrar en paz este acontecimiento y los fieles pudieron participar abiertamente en la ceremonia. Los lugares donde el estado ha impuesto la presencia de obispos ilegitimos sufrieron además acciones de intromisión como la decoración de las Puertas Santas de las catedrales con consignas en favor del socialismo y del oficialismo, así como la exclusión de las llamadas comunidades subterráneas que permanecen en completa fidelidad a la Santa Sede.
En la Diócesis de Shanghai no hubo ninguna ceremonia en la Catedral, debido a que el Obispo, Monseñor Tadeusz Ma Daqin continúa recluido en el Seminario de Sheshan por su renuncia a un cargo oficialista. El anuncio formal justificó la ausencia de celebración con la restauración de la fachada del templo que en teoría impediría la apertura de la Puerta Santa. Según informes oficiales, la Puerta Santa sería abierta una vez culminados en los trabajos. En contraste, la Puerta Santa de Zhouzhi pudo ser abierta por su Obispo, Mons. Martin Wu Qinjingmar, quien ha sido reconocido recientemente por las autoridades oficiales después de 10 años de ministerio episcopal clandestino y una larga condena de arresto domiciliario. La ceremonia reunió, según informó AsiaNews, más de 5000 fieles.
Con información de AsiaNews.
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