Sídney (Sábado, 19-12-2015, Gaudium Press) Un exhaustivo reporte publicado por el periódico Catholic Weekly de Australia abordó una serie de informaciones contrarias a la figura del Cardenal George Pell, quien por causa de una afección cardíaca no pudo viajar de Roma a Australia para testificar en investigaciones locales.
Cardenal George Pell, Prefecto de la Secretaria de Economía de la Santa Sede. Foto: Fr. Lawrence, OP. |
«La mayoría de personas sólo obtendrán información de los reportes mediáticos de estos alegatos, que necesariamente deben ser más sucintos, pero que también son frecuentemente sensacionalizados para atraer lectores», advirtió el informativo. «El problema es: estas cuestiones tienen un gran potencial de causar escándalo y desconfianza entre los católicos y otros si sólo una parte de la historia es publicada».
El reportaje aclaró, por ejemplo, que el purpurado ofreció alternativas para presentar su testimonio y responder las preguntas de los investigadores a través de una videoconferencia, opción que fue rechazada por la comisión investigadora sobre el tema de posibles abusos cometidos por miembros de la Iglesia, a pesar de haber sido admitida para otros testigos.
Además de no existir una voluntad de evadir la investigación, el reportaje destacó la escasa relevancia del testimonio del Cardenal Pell, quien no puede proveer información alguna que altere realmente el curso de la investigación. «Existe suficiente evidencia ya públicamente disponible que nos da una imagen muy clara y comprensiva de la respuesta a los alegatos hechos contra el Cardenal», afirmó la periodista Mónica Doumit.
Reportes como el de una supuesta conversación escuchada al Cardenal fueron desmentidos con hechos comprobables, como la presencia del purpurado y del sacerdote que supuestamente conversó con él en ciudades distintas en el momento que el testigo afirmaba que se reunieron. Esta y otras informaciones de prensa fueron abordadas para demostrar el inadecuado manejo de los datos. «Cualquiera que sea su opinión sobre el Cardenal Pell, seguramente podemos estar de acuerdo en que es injusto para cualquiera ser sujeto de sospecha constante y acusación basada en medias verdades, y cuando la historia completa está tan fácilmente disponible en el dominio público», concluyó el reportaje.
Con información de Catholic Culture y Catholic Weekly.
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