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Sídney (Lunes, 04-01-2016, Gaudium Press) Mons. John Fisher, Arzobispo de Sídney, Australia, continúa su recuperación en cuidados intensivos a causa de una grave condición conocida como síndrome de Guillain-Barré. El prelado fue internado en el hospital de San Vicente justo antes de Navidad y según un comunicado oficial «ha respondido extremadamente bien al tratamiento», por lo cual «espera ser transferido en brevedad fuera de cuidados intensivos», tras los cuales seguirían varias semanas de rehabilitación.
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| Mons. John Fisher, Arzobispo de Sídney, Australia. Foto: Arquidiócesis de Sídney. |
«El Arzobispo aprecia cálidamente las generosas y dedicadas oraciones y mensajes de apoyo que ha recibido en este tiempo», indicó el comunicado en el cual agradece «la comprensión y paciencia de los sacerdotes y el pueblo de la Arquidiócesis mientras se enfoca en su recuperación». El prelado aseguró por este medio «sus oraciones y buenos deseos por un Feliz Año Nuevo para todos».
La afección del Arzobispo inició con una infección gastrointestinal que se complicó con una respuesta inadecuada del sistema inmune, el cual comenzó a atacar al propio cuerpo y a afectar de manera grave las células nerviosas. El síndrome se caracteriza por el rápido debilitamiento de los músculos y una grave afectación de las habilidades motoras. Si bien este mal es una condición grave y repentina, «la gran mayoría de las personas realizan una recuperación plena», aclaró la Arquidiócesis.
Durante el período de convalescencia de Mons. Fisher, el Obispo auxiliar, Mons. Terry Brady; el Vicario General, P. Gerry Gleeson y las demás autoridades eclesiásticas locales «continuarán con el cuidado pastoral y la administración de la Arquidiócesis», informó el comunicado. La página web de la Arquidiócesis publicó una oración especial por el prelado y habilitó un formulario para enviarle mensajes de apoyo durante su enfermedad.
Con información de Arquidiócesis de Sídney.
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