Ciudad del Vaticano (Martes, 05-01-2016, Gaudium Press) El P. Pierbattista Pizzaballa, Custodio de Tierra Santa, ha hablado con Radio Vaticano sobre la liberación del sacerdote franciscano Dhiya Azziz, secuestrado el pasado 23 de diciembre en Yacoubieh, Siria. El Padre Pizzaballa, como Custodio de Tierra Santa, es responsable de los frailes menores ubicados en Israel, Palestina, Jordania, Líbano, Egipto (parcialmente), Chipre, Rodas, además de varias comisarías en diversos lugares de todo el mundo. Se le llama «Custodio», debido a su labor de ‘custodia’ de los santuarios donde se operó la redención del género humano, atendimiento de peregrinos, etc. La traducción de la corta entrevista es de Gaudium Press.
P. Dhiya Azziz |
P. Pizzaballa – La situación en Siria es siempre grave, dramática, pero nosotros estamos muy contentos y satisfechos que el Padre Dhiya haya sido finalmente liberado.
Radio Vaticano – ¿Es una esperanza que se abre también para otras liberaciones de religiosos?
P. Pizzaballa – Así lo auguramos. Los canales de comunicación están ahora abiertos. Este es un dato importante.
Sobre el P. Azziz
El P. Dhiya Azziz nació en Mosul, antigua Nínive, Irak, el 10 de enero de 1974. Hizo algunos estudios en el Instituto médico de su ciudad, pero decidió seguir la vida religiosa franciscana, ingresando al noviciado de Ain Karem, donde emitió sus primeros votos religiosos el 2 de abril de 2002. Al año siguiente fue trasferido a Egipto, donde permaneció por varios años.
En el año 2010 el religioso fue enviado a Amán, en Jordania. Y poco después llega ya a Siria, a Lattakia, el principal puerto del país.
Yacoubieh es una localidad relativamente cercana a Lattakia, a la que el P. Azziz se mostró solícito en atender. Entretanto, ella está bajo el control de las milicias de Jabhat al-Nusra, la rama de Al-Quaeda en el país.
El P. Azziz ya había sido secuestrado en julio pasado, en un secuestro «relámpago», de pocos días de duración, que también había terminado de la mejor manera. Jabhat al-Nusra había negado su implicación en ese plagio.
Son varias las personalidades católicas que han sido secuestradas en Siria, entra las cuáles destacamos al P. Paolo Dall’Oglio y al P. Jaques Mourad, de la Iglesia Sirio-Católica.
Con información y foto de Radio Vaticano
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