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Nazareth (Viernes, 12-02-2016, Gaudium Press) La Jornada Mundial del Enfermo, celebrada el pasado 11 de febrero en Nazareth, fue rodeada de una serie de eventos de preparación, que incluyeron momentos de oración, Eucaristías y un simposio sobre la sacralidad de la vida en el Notre Dame Center de Jerusalén. Todos estos eventos contaron con la presencia del Presidente del Pontificio Consejo de Pastoral de la Salud, Mons. Zygmunt Zimowski.
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| Eucaristía en la Basílica de la Natividad en Belén, Israel. Foto: Patriarcado Latino de Jerusalén. |
Los eventos de preparación iniciaron el domingo 07 de febrero, con una Eucaristía en la Iglesia de la Sagrada Familia en Ramallah, a la cual asistió una delegación vaticana de 50 personas y varios prelados de Tierra Santa. En su homilía, el Patriarca Latino de Jerusalén afirmó que la atención de los enfermos es un deber fundamental, esencial en el mensaje de Cristo. Por este motivo, la Pastoral de la Salud no es una actividad complementaria a la fe, sino parte integral del trabajo de la Iglesia.
En la Basílica de la Natividad en Belén se llevó a cabo una Eucaristía el día lunes, en la cual participaron unos 150 enfermos, entre los cuales se encontraban 20 provenientes de España, miembros de la Hospitalidad Jesús de Nazareth. En esta Eucaristía se administró la Unción de los Enfermos y las características de este sacramento fueron expuestas por Mons. William Shomali, Obispo auxiliar del Patriarcado Latino de Jerusalén.
Simposio sobre fin de la vida y discapacidad
Uno de los eventos centrales ligados a la Jornada Mundial del Enfermo fue un Simposio titulado: «La vida humana es sagrada, preciosa e inviolable: Problemas ante el final de la vida y la aceptación de las personas discapacitadas». El Simposio fue coordinado por el Dr. Etienne Lepicard y moderado por el Dr. Youssef Zaknoun y estuvo dividido en dos partes: la primera estuvo dedicada a la investigación biomédica y la legislación sobre los cuidados al final de la vida con testimonios de profesionales expertos en esta materia.
La segunda parte del simposio, dedicada a la aceptación de la discapacidad, es particularmente importante en Medio Oriente. Según expuso el sacerdote Faysal Hijazin, el porcentaje de discapacitados en Jordán y Palestina es uno de los más elevados del mundo. La Iglesia cuenta con varios centros al servicio de estas poblaciones y se expusieron varios testimonios de servicio en hospitales y prisiones. En la conclusión del simposio, el Patriarca Latino de Jerusalén anunció la creación de cuatro comités de ética cristiana en Tierra Santa.
Mons. Zygmunt Zimowski, el Obispo Boulos Marcuzzo y el Delegado Apostólico en Jerusalén y Palestina, Mons. Giuseppe Lazzarotto, además de otros prelados y sacerdotes, presidieron una jornada de oración en la Basílica de la Anunciación en Nazareth. En el encuentro se llevó a cabo la oración de la tarde de acuerdo con el rito greco católico melquita.
Con información de Patriarcado Latino de Jerusalén y Abouna.
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