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Bogotá (Domingo, 30-08-2009, Gaudium Press) El Secretario General de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), Mons. Juan Vicente Córdoba, indicó a los diferentes medio de comunicación su optimismo por que se mejoren las relaciones con los países vecinos Venezuela y Ecuador, tras lo ocurrido el viernes en la reunión de mandatarios de la Unasur en la ciudad de Bariloche, Argentina.
El prelado señaló que la reunión fue positiva y que sería el primer paso para recuperar la confianza entre los tres países y restablecer las relaciones políticas: «puede ser el principio de la distensión de conflictos con los vecinos (Venezuela y Ecuador). Los presidentes mostraron respeto a las naciones y a su soberanía y el tono moderado puede interpretarse como acercamientos con los países con los cuales hay tensiones», dijo Mons. Córdoba.
El Secretario de la CEC señaló que el viernes 4 de septiembre se tiene prevista una reunión entre los presidentes de las Conferencias Episcopales de Venezuela, Colombia y Ecuador, que buscaría un encuentro entre los mandatarios de estos países para buscar soluciones que permitan terminar con el conflicto que implica a las tres naciones.
«Si se logra reunir a los jefes de Estado de los tres países y a la Iglesia sería maravilloso. Sería un ideal, el presidente Uribe sé que lo aceptaría de inmediato, no se si los demás jefes de gobierno. Me encantaría una propuesta de los tres mandatarios con las Conferencias Episcopales para tener unos puntos más de discusión», indicó el prelado colombiano.
El obispo afirmó que el encuentro del próximo viernes buscará alternativas que permitirán crear «puentes de dialogo» entre los países, para superar de forma definitiva el distanciamiento de los mismos: «podemos hacer planes concretos con los presidentes de las Conferencias Episcopales para tener una propuesta de diálogo, de distensión, de perdón; de no mirar más el pasado.», manifestó Mons. Córdoba.
En la reunión de Unasur, los 11 presidentes de los países que la integran llegaron al acuerdo de fortalecer y colaborar en la lucha contra el narcotráfico y el terrorismo. Al final del encuentro tanto el presidente de Colombia, Alvaro Uribe como el de Ecuador, Rafael Correa, mostraron intenciones de un diálogo abierto.
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