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Nimbus (Lunes, 02-05-2016, Gaudium Press) El Obispo de Nsukka, Nigeria, Mons. Godfrey Igwebuike Onah, hizo un fuerte reclamo tras el ataque que fuerzas de Boko Haram realizaron en la localidad de Nimbus y que dejaron un saldo de 20 personas muertas. El prelado cuestionó los motivos de la retirada de las autoridades del lugar de la tragedia y la ausencia de acciones de persecución a los autores del delito.
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| Mons. Godfrey Igwebuike Onah, Obispo de Nsukka, Nigeria. Foto: Diócesis de Nsukka. |
El Obispo indicó que nuevamente «se oyen historias similares en los últimos tiempos en diferentes partes del país, incluyendo Abbi, otra comunidad de nuestra diócesis, que también está en el área local de gobierno Uzo-Uwani». Según Mons. Igwebuike Onah, cuya declaración fue divulgada por la agencia Fides, «el aspecto más doloroso de la matanza de Nimbus es que había sido anunciada, prevista y ejecutado sin inhibiciones, a plena luz del día».
Según el prelado las fuerzas del orden habían estado presentes en la zona para intentar recuperar el control, pero no lo estaban en el momento del ataque. «Lo que todos quieren saber es por qué las fuerzas de seguridad han realizado una ‘retirada táctica’ justo antes del ataque y por qué, cuando han vuelto a la escena de la matanza, no han realizado ningún intento para perseguir y detener a los autores», denunció el Obispo, quien reclamó las explicaciones en nombre en particular de los familiares de las víctimas mortales.
Además de asesinar a los habitantes de Nimbus, los miembros de Boko Haram buscaron a los sacerdotes católicos e intentaron incendiar la casa del párroco local, la cual no fue destruida por escacez del combustible empleado para tal fin. El prelado puso en duda ante la acción que el grupo terrorista Boko Haram se haya debilitado verdaderamente y formuló la posibilidad de que simplemente haya trasladado sus fuerzas del noreste al sureste de la región.
Con información de Agenc
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