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Lyon (Viernes, 03-05-2016, Gaudium Press) El Obispo de Lyon, Francia, Cardenal Philippe Barbarin, renovará la consagración de su Diócesis al Sagrado Corazón de Jesús en la noche del viernes 03 de junio al finalizar la Eucaristía de las siete de la tarde en la Catedral primada de la ciudad. «En el corazón del gran Jubileo de la Misericordia, llegamos ahora a la fiesta del Sagrado Corazón», destaca la presentación de la Consagración, que invita a reflexionar sobre las palabras de Dios Padre en el Bautismo de Cristo y durante su Transfiguración: «Este es mi Hijo amado. En quien tengo toda mi complacencia».
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| La totalidad de la comunidad eclesial se consagrará al Sagrado Corazón de Jesús para cumplir su misión. Foto: Fr. Lawrence, OP. |
La fórmula de consagración consta de varias partes para ser rezadas por los diferentes miembros de la Iglesia, como los ministros y seminaristas ordenados, las familias, los jóvenes, la congregación entera y finalmente el Cardenal Barbarin como autoridad de toda la comunidad eclesial.
Los sacerdotes y seminaristas piden «permanecer en Sus manos para ser mensajeros de su Palabra, los colaboradores de su obra de salvación, y su amor de Buen Pastor al servicio de todos», mientras que los religiosos «confiamos a su Sagrado Corazón y al Inmaculado Corazón de María, nuestros deseos y promesas pobreza, castidad y obediencia», así como la vivencia plena de su carisma y santidad.
Las familias imploran la gracia de ser verdadero «Santuario del amor y la vida». Además piden «permanecer siempre fieles a la oración personal y familiar, vigorizante contacto con Dios y su Palabra». Los jóvenes se consagran en unidad al Corazón de Cristo: «Injertados en Ti desde el día de mi bautismo, como una rama de la vid, quiero ser siempre tuyo. ¡Nunca lejos de ti!».
«Señor Jesús, yo, Philippe Barbarin, quiero en la sumisión y el amor, consagro hoy de nuevo al Sagrado Corazón nuestra Iglesia de Lyon, a ser un signo de su amor redentor de los hombres y mujeres que habitan nuestra hermosa diócesis», concluye el Cardenal en su fórmula de Consagración, «dejándole pleno y completo derecho sobre nosotros y todo lo que somos, sin excepción, según tu benevolencia, para la mayor gloria de Dios en el tiempo y la eternidad».
Con información de Diócesis de Lyon.
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