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Boston (Lunes, 07-09-2009, Gaudium Press) El Cardenal arzobispo de Boston, Mons. Sean O’Malley, ha publicado una entrada en su blog en la cual aborda las razones de la celebración de la misa pública de funeral del senador Edward Kennedy, el pasado 29 de agosto, y de su propia participación en ella.
Algunos sectores católicos se habían expresado en contra de la realización de los funerales, manifestando que ellos podían confundir a los católicos dado el público disentimiento del senador a la enseñanza de la Iglesia sobre el aborto. En su blog el Cardenal O’Malley trata sobre esta evidencia, y la gran decepción que ella comportó para muchos católicos:
«No es necesario decir que el velorio y el funeral católico del senador fueron controversiales por el hecho de que él públicamente no apoyó la enseñanza católica y la defensa de los no nacidos. Dado el efecto profundo de la doctrina social católica en muchos de los programas y políticas propugnadas por el Senador Kennedy y los millones que se beneficiaron de ellos, hay una trágica sensación de la oportunidad perdida en su falta de apoyo a los no nacidos. Para mí y para muchos católicos fue una gran decepción porque, de haber colocado la cuestión de la vida en el centro del Evangelio Social adonde pertenece, podría haber multiplicado el valor inmenso del trabajo realizado.»
Entretanto, Mons. O’Malley declara que fue apropiada la celebración pública de los funerales, y su participación en calidad de Arzobispo de Boston:
«Hay quienes objetaron, en algunos casos a gritos, que la Iglesia ofreciese un funeral católico para el senador. En los términos más enérgicos estoy en desacuerdo con esa posición. En el entierro del senador en la noche del sábado, con el permiso de su familia, nosotros nos enteramos de detalles de su reciente correspondencia personal con el Papa Benedicto XVI. Fue muy emocionante escuchar el reconocimiento del senador de su falta en no haber sido siempre un fiel católico, y su solicitud de oraciones en el momento en que se enfrentaba al final de su vida. La expresión de gratitud del Santo Padre por la promesa del senador de oración por la Iglesia, su confiar al senador y su familia a la intercesión de la Santísima Virgen y el impartir de la bendición apostólica, hablan del papel de Su Santidad como Vicario de Cristo, el Buen Pastor que no deja atrás a ninguno del rebaño.»
Conversación con Obama
El Cardenal O’Malley también refiere en su block, que durante los funerales tuvo la ocasión de expresar al Presidente Obama la oposición de la Iglesia católica a cualquier forma de financiamiento del aborto en la reforma al sistema de salud que se está llevando a cabo en los EE.UU.:
«El presidente Obama y tres ex presidentes asistieron al funeral del Senador Kennedy. Tuve la oportunidad de hablar brevemente con el presidente Obama, darle la bienvenida a la Basílica y compartir con él que los obispos de la Iglesia Católica están ansiosos de apoyar un plan para el cuidado universal de la salud, pero que nosotros no vamos a apoyar un plan que incluya una provisión para el aborto o que abriese el camino a abortos en el futuro. El Presidente fue amable en el poco tiempo que hablamos, él escuchó atentamente lo que yo estaba diciendo.»
Sobre su presencia en la ceremonia, el Arzobispo declara que consideró «apropiado representar a la Iglesia en esa liturgia como una muestra de respeto al senador, a su familia, a aquellos que asistieron a la misa, y a todos aquellos que estuvieron orando por el senador y su familia en esos momentos difíciles. Nosotros somos gente de fe y creemos en un Dios de amor y perdón de quien buscamos misericordia.»
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