Redacción (Jueves, 21-07-2016, Gaudium Press) Los medios de comunicación diocesanos son importantes para la Iglesia. Esto es lo que afirmó Mons. Nunzio Galantino, Secretario General de la Conferencia Episcopal Italiana (CEI), durante una entrevista con L’Ancora, semanario diocesano de San Benedetto del Tronto.
Mons. Nunzio Galantino, Secreatario General de la CEI / Foto: L’Ancora. |
El prelado, refiriéndose a la invitación del Papa Francisco de una Iglesia que está en salida dijo que «los diarios diocesanos tienen un rol muy importante porque son la voz de las periferias, aquellas periferias que muchas veces son ignoradas».
Asimismo, manifestó que en este tiempo, más que nunca, estamos llamados a comunicar «con sensibilidad, y también con las tecnologías que son más adecuadas al mundo de hoy».
Por lo que -prosigue el Secretario General de la CEI-, «debemos tener también nosotros, como realidad diocesana, la capacidad de poseer no solo el deseo de conservar sino también de innovar, para que aquello que decimos y aquello que hagamos tenga hoy un sentido, porque no está dicho que aquello que funcionaba ayer deba funcionar también hoy».
Al concluir la entrevista, Mons. Galantino invitó a los medios de comunicación de las diócesis a reflexionar y comprometerse; también les llamó a continuar y mantener «aquella pasión que los llevó a nacer».
Los medios de comunicación ayudan a acercar
Sobre la importancia de los medios de comunicación hoy para la Iglesia, se ha referido en varias ocasiones el Papa Francisco. Como lo que escribió en el mensaje para la Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales de 2014, que llevó por título «Comunicación al servicio de una auténtica cultura del encuentro».
Allí el Pontífice recuerda que hoy los medios de comunicación «pueden ayudar a que nos sintamos más cercanos los unos de los otros, a que percibamos un renovado sentido de unidad de la familia humana que nos impulse a la solidaridad y al compromiso serio por una vida más digna para todos. Comunicar bien nos ayuda a conocernos mejor entre nosotros, a estar más unidos».
Asimismo, en el mensaje para las Jornada de las Comunicaciones del presente año, el Santo Padre reflexiona sobre el uso de la tecnología para comunicar: «No es la tecnología la que determina si la comunicación es auténtica o no, sino el corazón del hombre y su capacidad para usar bien los medios a su disposición».
Sobre este tema, el Pontífice centra su atención en las redes sociales, ante las cuales interpela: «Las redes sociales son capaces de favorecer las relaciones y de promover el bien de la sociedad, pero también pueden conducir a una ulterior polarización y división entre las personas y los grupos. El entorno digital es una plaza, un lugar de encuentro, donde se puede acariciar o herir, tener una provechosa discusión o un linchamiento moral (…) El acceso a las redes digitales lleva consigo una responsabilidad por el otro, que no vemos pero que es real, tiene una dignidad que debe ser respetada. La red puede ser bien utilizada para hacer crecer una sociedad sana y abierta a la puesta en común».
«La comunicación, sus lugares y sus instrumentos han traído consigo un alargamiento de los horizontes para muchas personas. Esto es un don de Dios, y es también una gran responsabilidad», concluye el Papa.
De la redacción de Gaudium Press, con información de ancoraonline.it y Vatican.va.
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