Cuiabá – Mato Grosso (Martes, 02-08-2016, Gaudium Press) El Seminario de Catequesis de la regional Oeste 2 de la Conferencia Nacional de Obispos del Brasil (CNBB), en Cuiabá, ocurrió entre los días 23 y 24 de julio, inspirado en la temática «La Dimensión Celebrativa en la Iniciación a la Vida Cristiana».
El encuentro contó con las asesorías del obispo de Rondonópolis y referencial de la Catequesis, Mons. Juventino Kestering; del Padre Osmar Bezutte y de la coordinadora regional de la Catequesis, Hermana Ivone Hofer.
Hubo palestras, intercambio de experiencias, trabajos en grupos, confraternización y celebraciones.
Ya al inicio del seminario, Mons. Juventino comentó la importancia de la iniciación a la vida cristiana como proyecto de la Iglesia implicando pastorales, movimientos y presbíteros.
En ese sentido, el prelado recordó que la iniciación es un proceso que exige empeño del catequista, la familia, el planeamiento de la catequesis, la coordinación diocesana de pastoral, los presbíteros y la diócesis.
Al explicar la llamada dimensión celebrativa, Padre Osmar Bezzute resaltó que la relación entre catequesis y liturgia tiene una tradición y que el desafío es rescatar la intercomunión entre ellas.
En seguida, el presbítero presentó al grupo líneas formativas, como «rever la metodología usada en la catequesis, para que los encuentros sean siempre celebrativos, orantes, simbólicos; repensar las estructuras físicas donde ocurre la catequesis, para que se tornen espacios propicios para celebraciones; buscar un nuevo itinerario para la Iniciación Cristiana, introduciendo al catequizando en la vida de la comunidad recuperando la riqueza del catecumenado, que queda como horizonte para la catequesis», entre otros aspectos.
Para el asesor, «el desafío de una catequesis celebrativa es tornarla viva, haciendo que niños, jóvenes y adultos tengan ganas de volver a encontrarse con Dios, con la comunidad y con los hermanos».
El Padre Osmar considera también que «la catequesis debe aclarar la Fe, dirigir el corazón para Dios; incentivar la participación en los misterios litúrgicos, animar a apostolado y orientar toda la vida según el Espíritu de Cristo».
Hermana Ivone Hofer, a su vez, presentó el tema «La iniciación cristiana: desafío permanente», en el cual destacó que «la iniciación cristiana es el comienzo de un caminar, un itinerario, con diversas etapas, por medio de las cuales el catequizando adquiere madurez, profundidad, transformación de su vida, tornándose un cristiano adulto discípulo misionero».
Conforme la coordinadora de catequesis, «la iniciación es participar como miembro activo de la vida eclesial, profundizando el conocimiento, la celebración y la vivencia de la Palabra de Dios en la interacción Fe y vida».
En el último día del Seminario, Mons. Juventino Kestering habló sobre la «Catequesis de iniciación a la vida cristiana, en la dimensión celebrativa», teniendo como base el Documento de la CNBB N. 105, «Cristianos laicos y laicas en la Iglesia y la sociedad. Sal de la tierra y luz del mundo».
En el cierre, hubo una ceremonia de envío de los participantes a sus diócesis. (LMI)
De la redacción de Gaudium Press, con informaciones de la CNBB
Deje su Comentario