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Brasilia (Lunes, 05-08-2016, Gaudium Press) El Día del sacerdote, el pasado 4 de agosto, fue conmemorado en la Arquidiócesis de Brasilia con una Misa en Acción de Gracias presidida por el Arzobispo Mons. Sergio da Rocha, y concelebrada por los obispos auxiliares.
En total, más de 80 padres del clero arquidiocesano participaron de la ceremonia que tuvo lugar en la Parroquia dedicada al Santo Cura D’Ars, localizada en el Ala Sur.
En su homilía, Mons. Sergio aprovechó la ocasión para destacar la importancia del sacerdocio de San Juan María Vianney.
Según el prelado, a través de la vida de oración y dedicación a los hermanos, el Santo Cura D’Ars enseña a los sacerdotes cómo vivir la santidad, pues «el testimonio de San Vianney habla de modo especial al corazón de los sacerdotes y con certeza es señal de santidad no solo para la vida de los ministerios de los presbíteros, sino es señal de la santidad que Dios quiere para toda su Iglesia, para todo su pueblo».
Al comentar la celebración del Año Santo de la Misericordia convocado por el Papa Francisco, Mons. Sergio recordó a los presbíteros que es posible, así como San Juan María Vianney, ofrecer por medio de la oración la misericordia para el pueblo que sufre.
«El evangelio de hoy nos recuerda la mirada de compasión de Jesús para el pueblo sufrido. Jesús que ve la mirada de quien sufre junto con su pueblo», dijo. «Pero la obra de misericordia no para en la oración. No basta el sentimiento de compasión, tiene que haber gestos concretos de misericordia. La misericordia se expresa no solo con solidaridad y servicio en el sufrimiento, pero también se manifiesta en el perdón, y nosotros tenemos en el Santo Cura D’Ars el verdadero apóstol de la reconciliación, del confesionario, del sacramento del perdón. Hay mucha gente necesitada de perdón y de reconciliación, seamos nosotros ejemplos de instrumentos para la misericordia», concluyó. (LMI)
De la redacción de Gaudium Press, con informaciones de la Arquidiócesis de Brasilia
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