Obispo japonés pide que masacre de discapacitados abra los corazones al valor de la vida

Niigata (Miércoles, 10-08-2016, Gaudium Press) El Obispo de Niigata, Japón, y Presidente de Cáritas Asia, Mons. Tarcisio Isao Kikuchi, escribió un reflexión sobre la tragedia de Sagamihara, en la cual una persona asesinó a 19 personas discapacitadas e hirió a 26, de la cual tuvo noticia a su retorno de Papúa Nueva Guinea. «Fui totalmente impactado al saber que el sospechoso estaba justificando su acción contra los discapacitados como algo que los ‘salvara’ como ‘homicidio por misericordia'», comentó. Por este motivo oró para que la tragedia «abra los corazones japoneses al valor de la vida».

Mons. Tarcisio Isao Kikuchi, Obispo de Niigata, Japón.

Tras expresar sus condolencias a las familias de las víctimas y orar por las personas asesinadas, el prelado recordó la visión cristiana sobre la dignidad de la vida de los más vulnerables. «Basados en nuestra fe cristiana, no nos corresponde medir el peso de la vida humana. Es sólo Dios, Dios, quien creó nuestra vida humana y nos la regaló, tiene derecho de hacerlo». Por este motivo nadie puede otorgarse el derecho de decidir quién merece vivir.

«Más allá, Dios nos creó a su propia imagen, por lo cual todas las vidas humanas tienen su propia importancia y valor», explicó. «Esto es lo que llamamos Dignidad Humana». El Obispo se sumó a las críticas al brutal acto de discriminación e incluyó en su llamado la protección de los derechos de todas las personas vulnerables. «Todos estamos enfrentando o hemos sufrido algún tipo de dificultad en la sociedad y eso significa que todos tenemos el potencial de ser personas en una posición débil en la sociedad de un modo u otro. Por eso es que tenemos que ayudarnos. Es por eso que tenemos que apoyarnos. Si no lo hacemos, nosotros, seres humanos, podríamos no ser capaces de sobrevivir».

Mons. Kikuchi manifestó su esperanza de que «a través de enfrentar la realidad de este triste y terrible incidente en Sagamihara todos en Japón tengamos otra oportunidad para pensar sobre el significado de nuestras vidas y el valor de la vida humana. Entonces», concluyó, «espero y oro porque mantengamos en nuestro corazón el valor del apoyo mutuo para crear una familia humana».

Con información de AsiaNews.