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Bogotá (Jueves, 11-08-2016, Gaudium Press) «Yo quiero unirme a los colombianos para defender a las familias. Todos los que marchan por la defensa de la identidad de la persona humana son nuestros hermanos con una vocación de rechazar la imposición de una ideología», fueron las palabras que expresó ayer el Nuncio Apostólico en Colombia, Mons. Ettore Balestrero, a raíz de las manifestaciones pacíficas a favor de la familia que se realizaron este miércoles 10 de agosto en varias ciudades colombianas, entre ellas Bogotá, Medellín, Barranquilla, Bucaramanga y Cali.
Una multitud de personas, especialmente padres de familia, instituciones educativas y civiles, se manifestaron ante las orientaciones del Ministerio de Educación sobre ‘los manuales de convivencia’ en los colegios, con los que se plantea imponer la ideología de género en la educación.
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| La multitudinaria manifestación a favor de la familia ocurrió en las princiales ciudades de Colombia / Fotos: CEC. |
Al respecto Mons. Balestrero afirmó: «Negar que hay una estructura identitaria de la persona como hombre y como mujer e intentar imponer a niños ideas que todavía no tienen la posibilidad de entender es muy grave».
La Conferencia Episcopal de Colombia, el pasado martes 9 de agosto, también alentó a los colombianos a manifestarse a favor de la familia y en contra de la imposición de una ideología. El Cardenal Rubén Salazar, Arzobispo de Bogotá y Primado de Colombia, leyó un comunicado firmado por Mons. Oscar Urbina, Vicepresidente del Episcopado, en el que se felicitó a los padres de familia y las diversas organizaciones civiles que en los últimos días «han manifestado públicamente su preocupación por la implantación de la ideología de género en la revisión de los Manuales de Convivencia y de los Proyectos de Educación Institucional (PEI) de los colegios por parte del Ministerio de Educación de la República».
Lo que se plantea en la revisión de dichos manuales «atenta contra la familia como institución esencial de la sociedad, contra la autonomía educativa, la libertad religiosa, el derecho de los padres de escoger la educación de sus hijos, la libertad de conciencia, la libertad de asociación y el derecho de los niños de recibir una educación acorde a la ética y a la moral de sus padres. Sin duda es necesario promover el respeto de todas las personas en todos los ambientes de la vida social -comenzando por la familia, la comunidad educativa y la comunidad en general- pero esto no puede implicar la imposición de la ideología de género como norma para que el respeto debido se garantice», prosigue el Comunicado del Episcopado.
Con información de la Conferencia Episcopal de Colombia.
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