Valencia (Martes, 16-08-2016, Gaudium Press) Yacente sobre una cama, hermosamente durmiendo y coronada como Reina del Universo, así es la venerada imagen de la Dormición de la Virgen, o Nuestra Señora de la Asunción, que este lunes 15 de agosto salió en procesión por las calles de Valencia.
Los doce hombres, ataviados como los doce Apósteles, una vez más portaron sobre sus hombros la imagen de María para celebrar la solemnidad de la Asunción, para no faltar a la cita anual de una centenaria tradición. La procesión mariana se viene realizando ya desde el año 1352, catalogándose como la tradición y procesión más antigua de la Archidiócesis valenciana.
La procesión, de más de 600 años de tradición, salió por las céntricas calles de Valencia / Foto: Víctor Gutierrez – AVAN. |
El recorrido procesional, que estuvo acompañado por centenas de fieles y visitantes, comenzó desde la Catedral de Valencia saliendo por la puerta de los Hierro. De ahí continuó su camino habitual por las céntricas calles pasando por la plaza de la Reina y las calles del Mar, hasta la iglesia del Milagro, donde todo el año se venera la imagen de Nuestra Señora durmiendo.
El epicentro de la Solemnidad ha sido la celebración Eucarística que presidió el Cardenal Antonio Cañizares, Arzobispo de Valencia, en la Catedral. Durante la homilía, el purpurado ha señalado que la fiesta de la Anunciación «es un día para la esperanza», ya que hay la certeza cierta «de que María nunca nos deja».
Hablando sobre el presente Año Jubilar, ha dicho que la festividad mariana «brilla de manera muy especial», justamente por «la Asunción de la que es Madre de la Misericordia». Igualmente ha dicho que en María «tenemos el gran signo de la consolación y de la misericordia, de la victoria del amor, de la victoria del bien, de la victoria de Dios; ahí se nos abran las puertas de la gran esperanza».
En otro momento se ha referido al Libro de la Apocalipsis, leído durante la celebración, señalando: «siguiendo la lección de María, alcanzamos la capacidad creadora para una nueva humanidad para evitar los nuevos dragones que con fuerza propagandística defienden la ideología materialista, que no respeta ni defiende al pobre, donde sólo importa el consumismo y que trata la ideología de género como dominante; sin embargo lo importante es el respeto a la pobreza. Pero no temamos, Dios es más fuerte y triunfa en el amor».
Yacente sobre una cama, hermosamente durmiendo y coronada como Reina del Universo, así es la venerada imagen de la Dormición de la Virgen, o Nuestra Señora de la Asunción / Foto: Víctor Gutiérrez – AVAN. |
Esta fiesta mariana de Valencia tiene su origen desde el mismo momento de la reconquista en España. La historia recuerda que fue el Rey Jaime I quien decidió dedicar la Catedral valenciana al misterio de la Asunción, así como las iglesias que erigió en las tierras que iba conquistando.
Todo ello ocurrió siglos antes que fuese declarado el Dogma de la Asunción de María por el Papa Pío XII, hecho que ocurrió el 1º de noviembre de 1950 mediante la constitución «Munificentisimus Deus».
En dicha constitución está consignado: «Después de elevar a Dios muchas y reiteradas preces y de invocar la luz del Espíritu de la Verdad, para gloria de Dios omnipotente, que otorgó a la Virgen María su peculiar benevolencia; para honor de su Hijo, Rey inmortal de los siglos y vencedor del pecado y de la muerte; para aumentar la gloria de la misma augusta Madre y para gozo y alegría de toda la Iglesia, con la autoridad de nuestro Señor Jesucristo, de los bienaventurados apóstoles Pedro y Pablo y con la nuestra, pronunciamos, declaramos y definimos ser dogma divinamente revelado que La Inmaculada Madre de Dios y siempre Virgen María, terminado el curso de su vida terrenal, fue asunta en cuerpo y alma a la gloria del cielo».
Con información de AVAN.
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